Uber no se da por vencido

Uber es ilegal por facilitar que vehículos de servicio especial trabajen en una modalidad que no les corresponde. / Cristian Garavito

Como plataforma tecnológica, Uber no es problema para el Gobierno y los gremios de taxistas. La piedra en el zapato es que, a través de esta aplicación, vehículos de servicio especial, habilitados para operar a nivel turístico, escolar o corporativo, están prestando el servicio individual de pasajeros, algo que les compete, según la ley, a los taxis amarillos. Desde hace dos semanas, además, está disponible Uber X, por medio del cual carros particulares pueden prestar también el servicio de transporte.

Parece ser que esta fue la gota que rebasó la copa, pues luego de meses de incertidumbre y de múltiples anuncios que hablaban de proyectos de decreto para desenredar el nudo —que de todas formas al día de hoy aún no se han visto—, el Ministerio de Transporte y la Superintendencia de Puertos y Transporte fijaron una posición institucional conjunta frente al tema: “Las tecnologías que faciliten la prestación del servicio de transporte individual de pasajeros con vehículos de servicio público especial no son legales”.

Las autoridades están de acuerdo con que las plataformas tecnológicas son una herramienta que las empresas pueden utilizar para ofrecer un mejor servicio, siempre y cuando éste se acoja a la modalidad para la cual las empresas fueron constituidas. Por esa razón, otras aplicaciones, como Tappsi, Easy Taxi o Smart Taxi, no incumplen la regulación.

En el anuncio es claro que la nueva modalidad, Uber X, no ha pasado inadvertida, pues el Ministerio y la Superintendencia dicen que “no es permitido prestar el servicio público de pasajeros en vehículos registrados en el servicio particular”.

En cuanto a los distintos decretos que, se ha dicho, van a expedirse, el Ministerio aclaró dudas. “No estamos pensando, para nada, en sacar un decreto para regular aplicaciones tecnológicas”, dijo el viceministro de Transporte, Enrique Nates. “La ley establece cuáles son los procedimientos para que una empresa se habilite como prestadora del servicio público de transporte de pasajeros, ya sea individual de taxi o bien sea de carga o de transporte intermunicipal”. Por demás, regular plataformas tecnológicas sería competencia del Ministerio TIC.

La respuesta de Uber no se hizo esperar. “La tecnología y la innovación han logrado resolver ineficiencias del sector y mejorado la calidad de vida de los colombianos al tener acceso a alternativas de movilidad más seguras y eficientes”, dijo un vocero de la empresa de tecnología.

De la reacción se puede concluir que Uber no se va del país. “Seguiremos buscando proactiva y permanentemente espacios con el Gobierno Nacional, pues queremos participar en la generación de un marco regulatorio incluyente, moderno y que obedezca a un solo interés: el de los ciudadanos”.

Vale recordar que hace un mes entró en funcionamiento una aplicación que ofrece servicios especiales y de transporte individual de pasajeros, llamada App Viajes Imperial, desarrollada por ocho empresas, entre ellas, Viajes Imperial, que tiene a la cabeza a Uldarico Peña, uno de los mayores empresarios de taxis del país, y quien además ha estado al pie de la construcción de un proyecto de decreto y de ley que regule los servicios de taxis amarillos de lujo, que, en teoría, atenderían la demanda de pasajeros que desean mejor calidad en el transporte. En últimas, el nicho de Uber.