El precio del oro completó ayer su quinta jornada en ascenso. La cotización del metal cerró en 986,3 dólares la onza troy (una onza equivale a 31,10 gramos) en Londres, impulsado por la búsqueda de alternativas seguras de los inversionistas en los mercados. El lunes se había ubicado en 984,6 dólares.
El precio del oro ha subido 18% en lo que va del año. Durante 2007 sus incrementos llegaron al 33%, cinco veces más que el Dow Jones. Las razones que se asocian con este fenómeno tienen relación con las expectativas de que la Reserva Federal de Estados Unidos seguirá rebajando las tasas de interés, a la volatilidad del mercado accionario, la debilidad de dólar y a los altos precios del petróleo.
De acuerdo con analistas de la firma Lehman Brothers, "mientras el dólar siga bajo presión, los precios del oro seguirán avanzando". El dólar ha caído esta semana por una mayor preocupación en torno a la salud de la economía estadounidense.
El 3 de enero pasado, la cotización de la onza llegó a 860 dólares, un récord sin precedentes. Siguió de largo y a finales del mes se ubicó en 901 dólares la onza. El hecho obligó a que analistas como Goldman Sachs, que inicialmente había establecido que el precio este año estaría oscilando en la franja de los US$800 por onza modificara sus proyecciones y lo ubicara en 915 dólares la onza. Aunque se anticipó a manifestar que en el corto plazo el precio del metal puede llegar a ser 1.000 por onza.
Para que el precio del metal se mantenga sobre los 900 dólares la onza, debe haber una confluencia de factores, que no se ve lejana. Uno es que los precios de los commodities, los alimentos y el petróleo tengan altas cotizaciones, lo cual está ocurriendo. Este es el caso de la soya y el trigo, cuyos precios se duplicaron en 2007, alimentando los temores del incremento de la inflación, efecto que lleva a que aumente el precio del oro. Tradicionalmente el metal ha sido una cobertura para los momentos de altas inflaciones y de incertidumbres, porque a pesar de ser un metal, su liquidez es muy alta. Además, las oscilaciones del dólar y el oro son opuestas.
De otro lado, China anunció a principios del año que superó a Sudáfrica en producción, interrumpiendo el reinado de más de 100 años de este país como el mayor productor del mundo. En 2007 tuvo una producción de 276 toneladas. El gigante asiático también se convirtió en el segundo consumidor, después de India.
Colombia le apuesta al oro
En diciembre pasado el presidente Álvaro Uribe anunció el descubrimiento de un gran yacimiento en la mina La Coloso, en Cajamarca, Tolima. La magnitud del descubrimiento la confirmó Chris Andrea Lodder, presidente para las Américas de AngloGold Ashanti (la segunda compañía del mundo) que realiza la exploración, cuando manifestó que "allí se encuentra algo grande", que se confirmará en abril. La compañía planea invertir allí 25 millones de dólares este año.
Los altos precios del metal y las mejoras en las condiciones de seguridad y jurídicas para la inversión minera han puesto de nuevo a Colombia en el mapa mundial en lo que a exploración minera se refiere. Según Ingeominas, las empresas extranjeras más representativas en Colombia son: Bullet, en el municipio de Zaragoza, departamento de Antioquia, y la empresa canadiense Greystar Resources con el proyecto aurífero de Angostura en el municipio de Vetas California, departamento de Santander, manifestó.
En la parte de exploración se resalta el trabajo de esta última empresa, la cual ya tiene identificado un depósito de interés económico para explotación de oro. Igualmente en el departamento de Santander, municipio de California, la compañía CVS Exploration adelanta actividades de exploración.
La empresa Kedahda desarrolla estudios de exploración de tipo regional en diferentes zonas auríferas del país, con exploración geoquímica para oros blancos mineralizados ya identificados. Además de las anteriores, hay otras empresas extranjeras que están explorando posibilidades mineras en Colombia, tales como Barrick Gold Corp, Río Tinto Limited; Cambridge Mineral Resources; De Beira Goldfields; Colombia Goldfields y Antofagasta, entre otras.
Entre los nuevos proyectos que están siendo objeto de adjudicación están el de Taraira, en Vaupés, en la frontera con Brasil, que tiene 9.973 hectáreas y en donde se han hecho perforaciones de hasta 1.118 metros. En Nariño, el año pasado, Tao Minerals adquirió dos licencias de explotación de oro y viene de obtener áreas en Acandí, Chocó y en Frontino (Antioquia).