De acuerdo con el Presidente, "el Gobierno y las Fuerzas Armadas recuerdan que el Holocausto de la Justicia, ocurrido hace 25 años, fue un delito de lesa humanidad cometido por la alianza perversa entre el narcotráfico y una de las guerrillas de la época. La sentencia condenatoria al coronel Alfonso Plazas Vega genera profundo dolor y desestímulo en los integrantes de las Fuerzas Armadas, encargadas de dar seguridad a los colombianos".
El presidente Álvaro Uribe también manifestó su respaldo al ex presidente Belisario Betancur, quien también sería procesado por los hechos. "Respaldamos al Alto Mando Militar y Policial de la época, acusados injustamente de haber conocido con anticipación el plan criminal contra el Palacio de Justicia, y de haberlo permitido para justificar el ingreso al interior de la edificación y asesinar personas", enfatizó el primer mandatario.
De acuerdo con el Jefe de Estado, si bien es cierto que el Gobierno mantiene vivo el dolor por todas las personas asesinadas en el Palacio de Justicia, entre quienes se encontraban magistrados y civiles, soldados y policías, profesores, amigos y familiares, "la manera de apoyar a las víctimas del Palacio de Justicia no es creando víctimas en miembros de las Fuerzas Armadas".
El presidente Uribe fue enfático en señalar que el Gobierno y las Fuerzas Armadas estarán atentos al desarrollo de las instancias que todavía deben agotarse en el proceso contra el coronel Plazas Vega. "El Gobierno invita a los órganos del Estado y a todos los colombianos a pensar en una legislación que rodee de garantías a las Fuerzas Armadas, en el marco de su debida eficacia y absoluto respeto a los Derechos Humanos", enfatizó.
"Una nueva legislación debe ser rigurosa en la exigencia de probar el dolo para asignar responsabilidad a coautores mediatos tanto por acción como por omisión; también como elemento esencial del concierto para delinquir", aseveró.