Antes de viajara a Canadá, donde fue invitado a la cumbre del G-8, el Presidente de la República anunció que en este encuentro pedirá al mandatario francés, Nicolás Sarkozy, que le ayude en la recaptura del ‘Canciller de las Farc', Rodrigo Granda.
Según él, es necesario que este "terrorista" regrese al país para que responda por los crímenes que cometió en la guerrilla.
Uribe liberó a Granda como parte de un gesto unilateral en la búsqueda de la liberación de los secuestrados. Esto en momentos en los cuales aún permanecía en poder de las Farc la franco-colombiana Ingrid Betancourt.
"Colombia tiene una política internacional que firmemente ha dicho que estamos comprometido con todos los países hermanos para que el terrorismo no los afecte, pedimos reciprocidad en esa política", aseguró Uribe en rueda de prensa en la Casa de Nariño.
Según él, el mensaje que llevará a las potencias participantes del G-8 es que aunque Colombia "no es un paraíso sí será una potencia".
De ahí, su solicitud para que la comunidad internacional ayude en la búsqueda de la recaptura de los guerrilleros que liberó Uribe para intentar un gesto humanitario de parte de las Farc.