"Me acogí a sentencia anticipada y acepté los cargos que me imputaba la Fiscalía. Reconocí el acercamiento a esta organización armada ilegal, sólo para adelantar el proceso de paz, públicamente y a través de los medios he reconocido mi cercanía con las autodefensas", dijo Arias en declaraciones a La FM.
Respecto a su inconformidad con el procesamiento sostuvo: "Para mí no se convierte en un delito haber ayudado a esta gente a hacer la paz, que los comandantes hubieran llegado al Congreso de la República, que se hubiera desmovilizado el bloque Cacique Nutibara, pero para la justicia colombiana, para la Fiscalía, eso se convierte en un delito, porque a mí no podrán juzgarme por cualquier otra conducta delictiva. Siento que mis actuaciones fueron legítimas".
"Ella confesó y aceptó los cargos y solicitó una sentencia anticipada. El país quiere la verdad y ella le va a decir la verdad al país", señaló Abelardo de la Espriella, abogado defensor de la ex congresista. Arias y la también ex congresista Eleonora Pineda, recluida en la cárcel El Buen Pastor, de Bogotá, nunca desconocieron sus relaciones y simpatías por jefes paramilitares.
La ex congresista Arias fue vinculada formalmente el pasado 24 de octubre al proceso de la parapolítica, al ser llamada por la Unidad Nacional Antiterrorismo de la Fiscalía General para que aclarara sus presuntos nexos con las Auc, que la habrían beneficiado electoralmente.
A la indagatoria, se presentó la ex parlamentaria para anunciar que reconocía el delito de concierto para delinquir que le imputó la Fiscalía por la firma de pactos con las Auc en 2002 para favorecerse electoralmente y ser elegida al Congreso en ese año, como ocurrió.
Al respecto, La Corte Suprema de Justicia le pidió a la Fiscalía General, el 7 de junio pasado, investigar a la ex parlamentaria Arias por esos hechos, al tiempo que envió el testimonio que el jefe paramilitar desmovilizado Iván Roberto Duque Gaviria, alias 'Ernesto Báez', dio al máximo tribunal de justicia en el país.
Arias -que fue con Pineda un personaje cercano al desaparecido jefe de las Auc Carlos Castaño, asesinado por orden de su hermano Vicente Castaño-, según su abogado, espera colaborar con la justicia.
La semana pasada, la Corte Suprema de Justicia acusó a otros tres ex congresistas -Juan Manuel López Cabrales, Reginaldo Montes y William Montes- por sus nexos con jefes paramilitares, también por el delito de concierto para delinquir agravado.