Ecuador niega xenofobia y denuncia que Colombia quiere deslegitimarlos

El canciller ecuatoriano, Fander Falconí, así rechazó la insinuación hecha por el ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, Jaime Bermúdez, acerca de una presunta actitud xenófoba de Ecuador para los ciudadanos colombianos.

El Espectador
23 de enero de 2009 - 01:21 a. m.

"Bajo ninguna circunstancia Ecuador acepta que se le atribuya la posibilidad de establecer actitudes discriminatorias, de odio o racismo contra pueblos hermanos", señala un comunicado oficial difundido por la Cancillería en Quito.

Esta declaración se dio luego de que el ministro colombiano Jaime Bermúdez señalara que al Gobierno les "preocupa que haya un tratamiento discriminatorio, estigmatizado y quizá, incluso, xenofóbico, que puede haberlo, para los colombianos en ese país (Ecuador) o en cualquier otro país".

Bermúdez se pronunció así, cuando Ecuador anunció el pasado miércoles que reanudó la solicitud del pasado judicial a los colombianos que ingresen a ese país.

Caso seguido, el Gobierno de Ecuador enfatizó en su comunicado que "denunciamos que las declaraciones del canciller Bermúdez, realizadas un mes más tarde de la entrada en vigencia de la solicitud del pasado judicial, es parte de la permanente estrategia internacional de Colombia para tratar de deslegitimar a Ecuador".

Además, recuerda que el Gobierno de Bogotá ha acusado al de Quito de tener supuestas relaciones con las Farc, versión que también ha sido desmentida por Ecuador.

Por ello, la Cancillería ecuatoriana rechaza el hecho de que Colombia ahora acuse a Ecuador de tener supuestas "actitudes excluyentes y xenófobas".

"Ecuador, en Latinoamérica, es un país líder en materia de refugio, al ser el país que mayor acción humanitaria ha desplegado en la región por este tema, lo cual también ha sido reconocido por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur)", añade el texto oficial.

Asimismo, recuerda que Ecuador, "desde el año 2000, desde cuando se ejecuta el Plan Colombia (contra el narcotráfico y la guerrilla), ha recibido 55.691 solicitudes de refugio, ha acogido a 19.000 refugiados de nacionalidad colombiana" y "destinando ingentes recursos de su presupuesto para atenderlos".

Sin embargo, Ecuador justificó la aplicación del requisito del pasado judicial, debido "a la crisis humanitaria y a la escalada de violencia que sufre la frontera ecuatoriana (con Colombia), a consecuencia de la estrategia de repliegue del conflicto interno" colombiano hacia sus zonas fronterizas.

Ese repliegue, sostiene la Cancillería, ha causado "el consecuente ingreso de paramilitares, sicarios, narcotraficantes y delincuentes comunes colombianos".

Por esa razón, Ecuador, "muy a su pesar, decidió reinstaurar el pedido del pasado judicial, como medida soberana para diferenciar y evitar el ingreso de actores directamente implicados en las situaciones de violencia que vive Colombia".

El texto precisa que ese requisito no es obligatorio "para quienes solicitan protección internacional".

Según el Gobierno de Quito "casi 600.000 colombianos" viven en territorio ecuatoriano.

Ecuador mantiene rotas las relaciones diplomáticas con Colombia desde el 1 de marzo de 2008, fecha en la que militares colombianos, sin previo aviso, bombardearon y luego efectuaron una incursión terrestre a un sector de la selva ecuatoriana, donde las Farc habían construido un campamento clandestino.

Por El Espectador

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