El presidente venezolano, Hugo Chávez, llegaría a Cartagena el viernes por la tarde para asistir a la VI Cumbre de las Américas y regresará a Caracas durante la mañana del sábado, según informó la oficina de prensa de la cumbre..
El estado de salud del líder bolivariano, que este jueves volvió a Caracas desde La Habana después de haber sido sometido a nuevas sesiones de radioterapia en su tratamiento contra el cáncer, ha despertado dudas sobre su asistencia.
La ministra de Relaciones Exteriores de Colombia, María Ángela Holguín, se refirió al asunto varias veces esta semana y aseguró que Chávez deseaba viajar a Cartagena, aunque siempre puntualizó que eso dependería de su estado.
Según un comunicado difundido por la cumbre, Chávez llegará el viernes a las 14.25 hora local (19.25 GMT), pernoctará en Cartagena y regresará a Venezuela el sábado por la mañana, un día antes de la clausura de la VI Cumbre de las Américas.
Fuentes cercanas al Gobierno venezolano dijeron a Efe que Chávez y su delegación tienen reservadas habitaciones en un hotel situado en Boca Grande, una de las playas más visitadas de Cartagena.
Chávez recibiría el jueves al presidente de Uruguay, José Mujica, en Caracas y según algunas versiones ambos volarán juntos desde Venezuela hasta Cartagena.
En el comunicado oficial colombiano la llegada de Mujica está confirmada para el viernes pero sin horario.
Hasta ahora, han llegado a esta ciudad del Caribe colombiano el presidente chileno, Sebastián Piñera, y la primera ministra de Jamaica, Portia Simpson-Miller, que se le adelantó por poco.
Durante esta jornada arribarán también los presidentes de México, Felipe Calderón, Guatemala, Otto Pérez, y Nicaragua, Daniel Ortega, así como la primera ministra de Trinidad y Tobago, Kamla Persad.
El resto de los líderes americanos llegará a Cartagena el viernes y permanecerá en la ciudad hasta la clausura de la cumbre, el próximo domingo.
Los únicos países americanos ausentes en esta cumbre son Cuba, que no ha sido invitada por la alegada falta de libertades políticas en ese país, y Ecuador, cuyo presidente, Rafael Correa, decidió no participar en solidaridad con la isla.