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El “lobby” de la canciller ante la ONU

María Ángela Holguín dice que el apoyo de la Organización al proceso de paz es contundente y que la definición del Consejo de Seguridad sobre la verificación del cese del fuego se dará pronto. Hoy se reúne con Ban Ki-moon, secretario general.

Marcela Osorio Granados / Hugo García Segura
25 de enero de 2016 - 11:58 a. m.

Desde el jueves pasado, la canciller colombiana, María Ángela Holguín, se encuentra en Nueva York. Fue a explicar ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) los alcances logrados hasta ahora en el proceso de paz con las Farc en La Habana y a darle un empujón a la solicitud para que sea este organismo, a través de su Consejo de Seguridad, el que verifique el cese del fuego bilateral y definitivo y la dejación de las armas por parte de esa guerrilla, una vez se concrete un acuerdo final.

Ya ha tenido varias reuniones y hoy se encontrará con Rodolfo Nin Novoa, canciller de Uruguay; Edmond Mulet, jefe de gabinete del secretario general; Mogens Lykketoft, presidente de la Asamblea General, y Ban Ki-moon, secretario general de la ONU. En diálogo con El Espectador, Holguín habló del apoyo positivo y contundente de la comunidad internacional a la paz de Colombia, dijo que en pocos días se espera la decisión del Consejo de cara a la verificación y reveló que las Fuerzas Armadas harán parte del mecanismo tripartito que se tiene pensado para esa misión.

¿Qué percepción le queda hasta ahora de su visita a la Organización de Naciones Unidas (ONU)?

El apoyo de Naciones Unidas ha sido muy positivo y contundente, y eso ha quedado claro en las distintas reuniones que he tenido con el sistema mismo y con los representantes de los países. Hemos tomado la decisión en la mesa de La Habana de crear un mecanismo tripartito para el monitoreo y la verificación del cese del fuego bilateral y definitivo y de hostilidades, así como la dejación de armas. El objetivo es tener un componente internacional que será una misión política especial conformada por observadores. Le hemos solicitado a la ONU que escoja esa misión. Como la decisión será tomada por el Consejo de Seguridad y trabajada por la Secretaría General, quise venir a Nueva York a explicar el contexto en el que van las conversaciones de paz, pues su colaboración y apoyo son fundamentales.

¿Qué papel jugó el enviado especial de Naciones Unidas para el proceso de paz, Jean Arnault?

Él ha estado en varias reuniones de la subcomisión del punto del fin del conflicto y les ha transmitido las ideas y conceptos que maneja la ONU, experiencias concretas para ayudar a que lo que las partes decidan sea algo que se puede llevar a cabo sin mayores problemas.

El presidente Juan Manuel Santos ya había abonado terreno hablando de la verificación con los presidentes de algunos miembros del Consejo de Seguridad, ¿eso agiliza de algún modo el proceso en la ONU?

El presidente ha llamado a varios de sus homólogos y se ha reunido con algunos en cumbres en las que coincidió con ellos. Es el caso del presidente Obama, el presidente Xi Jinping de China y el primer ministro de Rusia, Dmitri Medvédev. Eso ha ayudado mucho a avanzar en conseguir el apoyo del Consejo de Seguridad.

¿Cuánto tiempo hay entre la petición y la definición de la misión por parte del Consejo?

Creo que la decisión será muy pronto, esperemos incluso que sea en pocos días. Ya los detalles de cómo será el tamaño de la misión y en dónde estará, dependen de los avances de la subcomisión que está trabajando en este momento en La Habana; esperemos que estas decisiones definitivas tomen poco tiempo.

¿Coinciden esos tiempos con los estimados por el Gobierno?

Sí. Lo que queremos es que se inicie su conformación para estar listos cuando firmemos el acuerdo final. Yo creo que estamos a muy poco tiempo de lograr este gran paso, el de la terminación del conflicto y la consecución de la paz en Colombia. Para todos los colombianos va a ser un cambio de vida total.

Se ha dicho que la comisión de verificación tripartita no tiene antecedentes, ¿por qué apostar por una fórmula diferente y no ir seguro a una estrategia ya probada?

Los mandatos tradicionales de la ONU, si ustedes miran, desde los años 50 hasta los 80 eran muy enfocados en estos temas. Luego avanzó en las llamadas misiones integradas. Naciones Unidas no tenía experiencia en un mecanismo tripartito y nos han manifestado su entusiasmo por lo que esto representa. En este acuerdo de paz, lo que decidan el Gobierno y las Farc es muy importante, creemos que es un conflicto con unas particularidades. No podemos solamente copiar otros casos sin entender el nuestro, y el mecanismo tripartito es algo que surgió de la mesa. Los resultados estarán en el compromiso de cada uno con la paz.

¿Es el Consejo de Seguridad el encargado de definir el “modus operandi” de la verificación o eso se acuerda también con el Gobierno y las Farc?

La ONU viene asistiendo de alguna manera a la subcomisión de La Habana que avanza en este tema, asesorándola en cómo sería la manera más idónea para implementar ese mecanismo tripartito. La decisión es del Gobierno y de las Farc, pero Naciones Unidas ha ayudado y ha aportado en ese sentido. Para que la misión especial pueda entrar en operación se requiere el acuerdo final, que se dará más o menos en el mismo tiempo en que esta misión se integre, así que estará lista para iniciar su trabajo con la firma. El cómo vaya a funcionar es lo que viene trabajando la subcomisión del fin del conflicto específicamente.

¿Es claro que la verificación sólo se dará tras la firma de un acuerdo final en La Habana?

Así es, esperemos que sea muy pronto.

¿No es necesario establecer primero el modelo de cese bilateral al que se llegará y los parámetros de la verificación, sobre todo en lo relacionado con las zonas de concentración?

En eso es en lo que se está trabajando en La Habana en la subcomisión que maneja el tema del fin del conflicto: dónde van a ser las zonas, cuáles van a ser las zonas y en cuántos lugares va a haber ese monitoreo y esa verificación. Lo que hemos hecho es pedirle a Naciones Unidas que, una vez adoptada la resolución, inicie de inmediato la conformación de esa misión especial, para que de esa manera, cuando tengamos los acuerdos, pueda establecer un mandato específico para la situación en el terreno.

El mecanismo de verificación estará presidido y coordinado por la ONU, que también tendrá facultad para dirimir controversias, realizar recomendaciones y presentar informes. ¿Ya está establecido cómo y cuándo se darían esos informes?

Eso lo decide el Consejo de Seguridad en su resolución. Generalmente es cada 180 días.

El presidente Santos dejó claro que al acudir a la ONU el tema de la financiación queda cubierto, pues es el organismo internacional el encargado de eso. ¿Cómo es ese proceso? ¿Cómo se define cuánto dinero se va a destinar para la verificación?

La misión especial es costeada por la ONU. Es una misión en donde hay recursos específicos para esto, tiene financiamiento. En lo que estamos en el proceso que se está adelantando en La Habana es específicamente en eso: de qué tamaño va a ser, en cuántos lugares va a haber ese monitoreo y esa verificación, para que puedan dimensionarse costos, y eso lo sabe el Consejo. Se le ha dicho que en el transcurso de semanas o un tiempo corto informaremos al secretario general el tamaño de esta misión.

También se ha dicho que será una misión no armada y que no estará conformada por militares activos, pero también que será Naciones Unidas la que debe decidir. ¿Se puede cambiar ese precepto y tener militares activos y armados?

No. Está claro que la misión es una misión política especial, es decir, con observadores no armados. No se cambia una misión política por una de cascos azules. La misión que estamos solicitando se enmarca dentro del capítulo 6 de la Carta de Naciones Unidas, donde se dirimen controversias; las misiones militares pertenecen al capítulo 7. Tomamos la decisión de darle carta abierta a Naciones Unidas para que escoja los observadores porque tiene mucha experiencia en este tipo de ejercicios. Escoge por las capacidades del país, la idoneidad de las personas, el entrenamiento de esos observadores. Muchos países de la región participan en diversas operaciones alrededor del mundo y, por lo tanto, tienen experiencia en su trabajo.

¿Qué papel tendrá el Ejército Nacional en todo este proceso?

Las Fuerzas Armadas, no solo el Ejército, son las que están en las conversaciones en La Habana y específicamente son los que coordinan el punto 3 de la agenda del fin del conflicto. Son los generales que están en la mesa desde hace ya casi un año decidiendo la mejor manera de llevar esto a cabo y harán parte del mecanismo tripartito.

¿Siente el Gobierno que lo pactado hasta ahora en la mesa de negociaciones tiene total y pleno respaldo en la comunidad internacional?

Lo que le puedo decir, como lo mencioné al comienzo de esta entrevista, es que es evidente que hay un gran interés de la comunidad internacional en apoyar a Colombia en este proceso. Muchos, como ustedes mismos lo han divulgado, han manifestado su entusiasmo por este, por el camino emprendido hacia la terminación del conflicto y la consecución de la paz en Colombia y han manifestado su interés de ser partícipes de este gran paso.

 

@marcelaosorio24 / @hgarciasegura

Por Marcela Osorio Granados / Hugo García Segura

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