Un escándalo se desató este jueves en Bogotá por cuenta de una 'parranda' política organizada por el senador Roy Barreras Montealegre y el concejal Andrés Camacho Casado, implicado en el carrusel de contratación.
Se conoció que el pasado martes hubo un 'festín' con fines electorales en la capital entre el legislador vallecaucano y el cabildante de la ciudad.
Al ser consultado, Barreras defendió el encuentro con más de 2.000 líderes populares de varios barrios de Bogotá que asistieron a la cita.
"Hay más de 50 mil electores del partido de La U que yo no voy a dejar abandonados en la debacle de los concejales de Bogotá", aseguró.
"Cada líder y dirigente popular frente a sus reclamos y expectativas son electores de mi partido y no los vamos a dejar al garete", insistió en varias ocasiones en su defensa.
Según él, la cita se dio porque "queremos que sientan que el partido los acoge y que la base popular de La U está acompañada".
Igualmente, el senador defendió que Andrés Camacho no ha sido condenado por el sonado escándalo del carrusel.
"Quienes hayan sido condenado le deben una disculpa a la ciudad pero en el caso de Andrés Camacho eso no ha ocurrido", manifestó.
Y agregó: "Yo conozco a Andrés Camacho y creo en su inocencia y hasta que no se decida lo contrario debo seguir creyendo...no vamos a dejar al garete a 50 mil miembros de nuestra organización".