“Al Gobierno le preocupa mucho lo que está pasando con la consulta del PND con las comunidades negras, puesto que la Corte Constitucional podría tumbarlo y tendría graves consecuencias de legitimidad”, reveló una fuente del Ejecutivo. La cuestión no es sencilla, puesto que para poder consultar el proyecto con esta minoría étnica tendría que entrar a resolver un asunto de hondo calado: ¿cómo y con quién se debe adelantar la consulta? Un problema que se ha venido agravando desde 2010 y que hoy tiene al Gobierno sin saber la ruta para hacer efectivo el derecho a la consulta previa, libre e informada.
En una carta al presidente Juan Manuel Santos, la Autoridad Nacional Afrocolombiana (Anafro) le expresó su preocupación por no haber sido consultados para el PND y le advirtió que el 85% de los compromisos del pasado plan con estas comunidades no han sido cumplidos. De igual manera denunció que el Ministerio del Interior ha violado las decisiones de la Corte Constitucional que obligan al Ejecutivo a acoger el protocolo de consulta elaborado por el pueblo negro el año pasado en Quibdó.
“Como movimiento enviamos a usted el mensaje sobre la necesidad de encontrar una salida en el marco de la Constitución Política y establecer un acuerdo para superar una situación legal sumamente compleja, como quiera que el país podría correr el riesgo de no tener PND o entrar en un nuevo litigio legal como el que dio origen a la sentencia T-576 de 2014, que el Ministerio del Interior intenta en este momento cumplir de cualquier manera contrariando las propias órdenes de la Corte y los principios básicos de una consulta previa libre e informada”, dice la misiva.
La queja puntual es que el Ministerio del Interior convocó a unas asambleas departamentales para socializar el PND y elegir los voceros con los que se realizaría la consulta, ya que hoy no existe espacio nacional para realizar este procedimiento pues la Corte Constitucional consideró que tal espacio debía ser autónomo de las comunidades y conminó a la cartera del interior a acoger su propuesta de consulta, cosa que hasta hoy no se ha cumplido y pone en peligro la carta de navegación del gobierno Santos.