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El Gobierno Nacional lamenta la muerte de la familia Manrique Lutz que vivía en Australia y brinda asistencia a los familiares tanto en el país como en el extranjero. (Leer El drama de los Manrique).
La Cancillería informó que se abstiene de hacer declaraciones formales sobre el suceso por “petición de la familia”, pues solicitó “respeto a la intimidad, a la privacidad y el principio de confidencialidad de la información”.
María Claudia Lutz, Fernando Manrique, y sus hijos Elisa de 11 años y Martín de 10, fueron encontrados muertos este lunes en la casa que habitaban desde 2005 ubicada en la calle Sir Thomas Mitchell del barrio Davidson, en Sídney, Australia. Allí también fue encontrado el cuerpo sin vida del perro de la familia.
La policía no ha podido encontrar testigos de los hechos o alguna señal que les ayude a aclarar el caso. Por la circunstancias de los hechos, los medios locales tienen la teoría que pudo tratarse de un suicido-homicidio. Sin embargo, Dave Darcy, comandante de policía del área en donde sucedió la tragedia dijo que quería mantener todas las opciones abiertas y aclaró que tras una conversación con los investigadores acordaron que es demasiado temprano para llegar a una conclusión.