“Yo soy del extremo centro. Yo soy la tercera vía”. Eso dijo el presidente Juan Manuel Santos en una entrevista para BBC Mundo hecha en Ciudad de México, durante su visita a esa ciudad, donde participó en el homenaje que se le hizo a Gabriel García Márquez. Una entrevista en la que se fue lanza en ristre contra el expresidente Álvaro Uribe y su movimiento Centro Democrático, al que calificó como de “extrema derecha” y culpó de algunos sabotajes que se han hecho por parte de muchachos con camisas negras a sus apariciones en el marco de la campaña reeleccionista. “Eso es una especie de neonazismo, de neofascismo, que lo único que causa es polarización y odios”, dijo.
Santos aseguró además que hay quienes están tratando de manipular con mentiras y rumores falsos a muchos sectores en el país, para que vayan en contra del proceso de paz con las Farc. “Por ejemplo, están diciéndoles a los militares que los van a reducir a su mínima expresión. A los policías les dicen que les van a quitar sus pensiones para dárselas a los guerrilleros. Están haciendo una guerra sucia. Y eso a cierta gente le cala y eso hace daño”, manifestó. En este sentido, reiteró que no se está negociando nada más allá de lo establecido en la agenda, que no es más que “la transición de un grupo armado a la vía legal para que pueda hacer política sin las armas”.
Asimismo, el jefe de Estado dijo estar dispuesto a sacrificar hasta su vida por la paz de Colombia y señaló que espera que los diálogos no se caigan si no es reelegido: “No es fácil elaborar un proceso de esta naturaleza, eso requiere tejer muy fino en muchos frentes”. Por otra parte, consideró como absurdos los señalamientos que le hacen de que estaría entregando el país al castro-chavismo; descartó que el uribismo vaya a tener capacidad para bloquear al Gobierno en el Congreso, aunque seguramente hará mucho ruido, y reconoció que su obsesión es pasar a la historia como el presidente que logró la paz en Colombia: “Es un deseo que he tenido hace muchos años”, concluyó.