Tras la culminación del debate sobre la reforma política de este miércoles en la Comisión Primera de la Cámara de Representantes, Guillermo Rivera, ministro del Interior, señaló que hay una mayoría interesada en discutir la propuesta y se hagan los ajustes a las normas que rigen a las autoridades electorales vigentes. (Lea: Negada la proposición de archivo de reforma política en la Cámara)
Tal como quedó acordado en la discusión, anunció que se trabajará durante todo el fin de semana para lograr un texto en el que haya un consenso mínimo y se pueda aprobar rápidamente.
Sin embargo, advirtió que hay una línea roja para hacer dichos cambios. “No se pueden hacer modificaciones que vayan en sentido contrario a lo que se propone en el acuerdo de paz. Todos los ajustes deben estar alineados con lo previsto ahí”, señaló Rivera.
Algunas de esas líneas rojas van en el sentido de la creación de una organización electoral “independiente, moderna y transparente”, definir medidas para evitar la financiación ilegal o desbordada, permitir la aparición de nuevo movimiento políticos en el espectro cuya personería jurídica no dependa del umbral electoral sino de un número de afiliados, etc. (Lea también: La pelea en la Cámara de Representantes durante el debate de la reforma política)
Una de las primeras modificaciones que tendrá el texto será la eliminación del artículo primero, que determinaba el grado de consulta jurisdiccional de las decisiones que profieran la Procuraduría y la Controloría en contra de servidores públicos de elección popular, siempre y cuando conlleven a inhabilidades.
Luego de un documento de doce páginas, enviado por los entes de control, y una larga discusión y reparos por parte de organizaciones, como la Misión de Observación Electora (MOE), se acordó retirar dicho artículo.