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“Queremos cambiar el mapa político del país”: Norbey Marulanda

El representante a la Cámara dice que a través de un proyecto de ley se le quiere dar representatividad a casi 50% del país que hoy no tiene voz en el Senado.

Camila Zuluaga
04 de agosto de 2015 - 04:33 a. m.
El representante a la Cámara Norbey Marulanda. / Cortesía
El representante a la Cámara Norbey Marulanda. / Cortesía

El pasado 20 de julio se radicó nuevamente en la Cámara de Representantes un proyecto de ley que busca cambiar el mapa político del país. Hoy en día, en el Senado de la República, el 47% de los departamentos de Colombia no cuentan con congresistas que los representen, y por esa razón este proyecto busca promover en la actual legislatura el cambio de esa realidad. El Espectador habló con el representante a la Cámara Norbey Marulanda, líder de la iniciativa.

¿Por qué quieren cambiar el sistema actual de circunscripción nacional para llegar al Senado de la República?

Porque queremos darle representatividad a un territorio que es casi el 50% del país y que hoy no tiene representación en el Senado. Queremos que la democracia se vea realmente en todos los departamentos, ya que el sistema actual no permite que líderes de todas las regiones tengan su asiento en el Senado. Este proyecto busca cambiar el mapa político para darles voz y voto a todas las regiones.

¿Qué departamentos no tienen representación en el Senado actualmente?

Amazonas, parte de la Orinoquia, Chocó, el archipiélago de San Andrés y Providencia, La Guajira y Quindío.

¿Por qué razón el sistema actual no permite que esos departamentos tengan representación en la Cámara Alta del Congreso?

Porque es imposible debido al número de habitantes que cada uno de esos departamentos tiene. En el caso de Vaupés, al cual represento en la Cámara de Representantes, tenemos cerca de 42.000 habitantes, pero el censo electoral no supera los 20.000. Difícilmente vamos a quedar incluidos en una lista al Senado de cualquier partido aspirando por un territorio como este.

Además del número de habitantes que tiene cada uno de estos departamentos, ¿existe algún otro motivo o explicación para que no puedan llegar personas de estas regiones al Senado?

Básicamente se trata del número de habitantes, porque para ser senador se debe considerar una lista con un mínimo de 35.000 votos. Además, los liderazgos en estas regiones siempre han sido locales, del departamento. Escasamente nos conocemos con departamentos como Guainía y Guaviare, porque son departamentos de tránsito hacia nuestras regiones. Pero nuestros líderes nunca han tenido relevancia nacional, y difícilmente la van a tener por la coyuntura política del país.

¿Por qué es imposible que líderes de sus regiones sean reconocidos en todo el territorio nacional?

Por ejemplo, en Vaupés, en las elecciones pasadas, la candidata que más votos sacó fue Maritza Martínez, que tuvo alrededor de 300 en circunscripción nacional. Entonces, es bien complicado que se enfrenten a poderes electorales como los de Córdoba y Bolívar dentro de una lista de un partido político para acceder a una curul.

Pero hay quienes le pueden decir que para eso está la Cámara de Representantes, donde cada región tiene su congresista para que sea la voz en el Congreso. ¿Por qué la necesidad de llegar al Senado?

Ese es el inconveniente que se ha venido presentando en la política nacional, porque no sólo en la Cámara de Representantes se hacen las leyes y actos legislativos, se necesita que estas leyes pasen por las dos cámaras. Y al no tener representatividad en la Cámara Alta, siempre hemos quedado por fuera de cualquier posibilidad de que una ley y un acto legislativo sean iniciativa parlamentaria de estas regiones, porque no hay quién las defienda en el Senado.

Este tipo de iniciativa que usted propone se ha presentado varias veces en el Congreso y nunca ha triunfado. ¿Por qué esta vez sí?

Así es, este proyecto ha sido considerado en el Congreso once veces y nunca ha sido aprobado, precisamente por eso, porque no tenemos representación en el Senado. Pero esta vez creemos que existe cierta motivación, ya que en el pasado acto legislativo, que denominamos “equilibrio de poderes”, estuvimos a punto de que se aprobara un artículo en el cual estos territorios nacionales, incluido el departamento del Chocó, tuvieran un asiento en el Senado.

¿Por qué no se aprobó ese artículo del equilibrio de poderes?

Por falta de voluntad de los senadores, porque no entendemos cuáles son las razones que esgrimen para que estos territorios no estén representados en la Cámara Alta. Se nos hundió en el último debate.

Por eso le preguntaba por qué esta vez sí hay ambiente para que pase este proyecto si se acaba de hundir la iniciativa…

Porque la fórmula matemática que estamos proponiendo en esta ocasión hace que no se vean lesionadas las regiones, porque tal vez en el último intento se pensó erróneamente que les estábamos quitando la posibilidad a algunos senadores de salir elegidos de nuevo. Ahora, con este nuevo proyecto, estamos planteando la posibilidad de que todos los departamentos tengan una amplia participación y que no por eso se van a ver lesionados los intereses de las regiones que ellos dicen defender.

¿Cómo es esa fórmula matemática que proponen? ¿Qué cambio generaría?

La conformación del Senado queda con el mismo número de integrantes, es decir 102. Serían 99 por circunscripción territorial, más las dos curules indígenas y agregaríamos la representación de colombianos que están en el exterior. Además, la fórmula nos da la posibilidad de que departamentos como Santander tengan cuatro senadores y Caquetá pueda elegir no uno sino dos senadores. Bogotá podrá elegir 12 senadores porque hoy vemos que hay muchos que se han hecho elegir por la capital pero no la defienden, y lo que necesitamos es que nuestros senadores defiendan sus territorios.

Por Camila Zuluaga

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