Publicidad

Transcaribe, la prueba de fuego para Manolo Duque en Cartagena

Nuevamente, Cartagena optó por un periodista para dirigir el rumbo de la ciudad al elegir a Manuel Vicente Duque, conocido como Manolo, que tiene retos como la puesta en funcionamiento de Transcaribe, los problemas de seguridad y una elevada deuda pública.

Marcela Madrid Vergara
02 de enero de 2016 - 01:50 a. m.

Después de una década de espera, Transcaribe llegó para convertirse en el dolor de cabeza del nuevo mandatario. Desde que se dio inicio a la etapa pedagógica a finales de noviembre, el caos vehicular provocó el descontento de gran parte de los ciudadanos. Incluso los órganos de control le pidieron al alcalde saliente, Dionisio Vélez, suspender el sistema por no contar con las condiciones para funcionar: falta de un plan de chatarrización, estaciones sin terminar, pocos buses, ausencia de un patio portal, puentes peatonales y semaforización.

En un principio, Duque estuvo de acuerdo con la petición. Sin embargo, cuando el Gobierno manifestó que Transcaribe debía seguir rodando, no le quedó más que retractarse y apoyar la continuación de la fase pedagógica.

En cuanto a seguridad, sólo el 15% de los cartageneros se sienten seguros en su ciudad, según una encuesta de Cartagena Cómo Vamos. No es para menos, pues durante 2014 se presentó el mayor número de muertes violentas de los últimos años. Para María Claudia Peñas, coordinadora de este programa, la administración debe trabajar para fortalecer la convivencia ciudadana y “hacerle frente a la nueva composición del homicidio, pues en Cartagena hay más muertos por riña común y entre pandillas que a manos de sicarios”.

Uno de los puntos pendientes de las últimas administraciones es el traslado del mercado de Bazurto para recuperar la seguridad y salubridad de la zona donde se encuentra. Así lo ordenó en 2011 un fallo del Tribunal Administrativo de Bolívar, el cual estipuló el 22 de febrero de este año como fecha límite para acatarlo.

Ante esto, se decidió crear una central de abastos y otros mercados sectoriales, pero los avances dejan claro que será imposible cumplir con el plazo. Aunque ayer se entregó el mercado sectorial de Santa Rita, sólo recibirá 200 comerciantes de Bazurto, y de la central de abastos sólo se tienen los diseños.

El nuevo alcalde hereda una deuda de $250.000 millones por cuenta de un crédito público —uno de los más grandes en años— aprobado a Dionisio Vélez para obras de infraestructura. El contralor distrital, Mario Feliz Monsalve, recuerda que también se está pagando un préstamo de la administración Judith Pinedo y le recomienda a Duque “ser muy medido en el gasto público y concentrar los pagos en la banca para mantener las calificaciones positivas”.

Por Marcela Madrid Vergara

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar