Un Concejo de Bogotá que quiere repetir

En Bogotá buscan la reelección 32 de los 45 concejales. Es el 71%, una mayoría proveniente de los nueve partidos que hoy tienen representación en el cabildo. Por el hecho de contar con un electorado que los conoce, arrancan con ventaja frente a los cerca de 520 candidatos que quieren llegar por primera vez o retornar después de años de ausencia. Y ya que hace cuatro años fueron reelegidos 31, puede esperarse una tendencia a la continuidad, que en cierta medida significa experiencia, con un toque de renovación. Una combinación necesaria para debatir el Plan de Desarrollo, un nuevo POT y la posible creación de la secretaría de seguridad que proponen varios candidatos a la Alcaldía.

 

En esta campaña, por otra parte, sólo dos partidos tienen lista cerrada, en la que el primer renglón es la gran apuesta de la colectividad. En el Centro Democrático esa figura es Diego Molano, quien fue director de Acción Social durante el mandato de Álvaro Uribe. Por la Unión Patriótica está Aída Avella, exfórmula vicepresidencial de Clara López y concejal entre 1992 y 1996, año en que sufrió un atentado que la llevó al exilio.

 

Las cabezas de los otros 13 partidos, al integrar listas abiertas, no tienen la primera opción. Pero ser el primero tiene su peso y ese lugar lo ocupan, en general, concejales que ya conocen los intríngulis del oficio. Es el caso del Polo, ASI, Alianza Verde, Cambio Radical, el Partido Conservador y el Liberal (ver gráfico). Ser curtidos y reconocidos en los medios, sin embargo, no implica el mejor desempeño, a juzgar por la más reciente calificación del programa Concejo, Cómo Vamos.

 

El MIRA, Opción Ciudadana y la U, teniendo concejales activos, optaron por nuevas figuras para sus primeros renglones. El partido cristiano presenta a Gloria Stella Díaz, exrepresentante a la Cámara exitosa tramitando proyectos de ley. La U se la jugó a última hora por el periodista Silverio Gómez, de la línea del senador Jimmy Chamorro y expresidente de la Cámara de Comercio de Ibagué.

 

La más novata es Isis Caicedo, de 21 años, cabeza de lista de Opción Ciudadana (antiguo PIN) e hija del representante legal de ese partido, Álvaro Caicedo. En el partido indicaron que la carta fuerte, no obstante, es Luis Fernando Rosas, segundo renglón. Este exconcejal y exdirector de Turismo de Petro hizo fila para la lista del Centro Democrático. De hecho, de los 45 de Opción Ciudadana, “como 20 vienen del uribismo”, asevera.

 

Progresistas, movimiento del alcalde, tiene a Hollman Morris de primero, exgerente de Canal Capital que declinó su aspiración a la Alcaldía. Por el Movimiento Libres, del candidato a la Alcaldía Ricardo Arias, la figura es Luis Lorduy, exviceministro de Defensa que en 2014 encabezó la lista del uribismo a la Cámara en Atlántico. De los partidos indígenas, Aico va con Alberto Buenaventura, excandidato de la U a la Cámara por Bogotá, en primer lugar. El MAÍS, con Óscar Flórez, hace una campaña de discurso agrario que pretende arañar votos para Clara López, igual que la UP.

 

El nuevo Concejo debería superar el fantasma del carrusel de la contratación. Después de su crisis en la administración de Samuel Moreno (2008-2011), el escándalo siguió vivo, al punto que cinco cabildantes elegidos en 2011 no terminaron su período ante el llamado de la justicia: Orlando Parada y Andrés Camacho (U), Jorge Salamanca (Liberal), Ómar Mejía (Conservador) y José Juan Rodríguez (Alianza Verde). La posibilidad de evitar que esos personajes se cuelen en el cabildo depende, en buena parte, de que los ciudadanos piensen su voto.