De acuerdo con los investigadores, con esta nueva técnica, que busca estimular el sistema inmunitario frente a la enfermedad, se puede tratar un gran número de cánceres surgidos de las células epiteliales que revisten las superficies internas y externas del cuerpo. Estos son los más comunes: representan el 80% de los casos.
El método, en pocas palabras, consiste en destruir las células del sistema inmunitario del enfermo a través de quimioterapia para, posteriormente, reemplazarlas por células reprogramadas capaces de reconocer a las células cancerosas mutantes y destruirlas.
Recientemente, los científicos han generado células T específicas para las mutaciones originadas en ciertos tumores malignos y luego las infunden en los pacientes para generar una respuesta antitumoral.
Según Steven A. Rosenberg, jefe de la unidad de cirugía del Centro del NCI para la Investigación del Cáncer, antes de este trabajo no había quedado claro si el sistema inmunitario humano podría organizar una respuesta eficaz a las proteínas “mutantes” producidas por los cánceres de células epiteliales.