Los médicos de un hospital de la ciudad brasileña de Baurú informaron que lograron retirar con éxito un cuchillo que había penetrado diez centímetros en la cabeza de un campesino, en circunstancias que aún no han sido esclarecidas.
El campesino fue llevado a un hospital de Baurú, en el estado de Sao Paulo, la noche del pasado domingo con el cuchillo clavado en la cabeza pero consciente, al punto de que conversó con los policías de guardia en el sanatorio.
Según el comisario Jader Pinzón, a cargo del caso, en su primera declaración incurrió en ciertas contradicciones y llegó a insinuar que él mismo se había clavado el cuchillo en un supuesto intento de suicidio, aunque dijo que no recordaba bien qué había sucedido.
No obstante, la policía sospecha de que fue agredido, sólo que hasta ahora no tiene pistas sobre él o los posibles autores.
"Fue encontrado en medio de la calle. Caminaba normalmente con el cuchillo clavado en la cabeza y pedía socorro. Lo recogieron unas personas y lo llevaron al hospital", explicó el portavoz policial.
Según los médicos que le atienden, el hombre, de 40 años y cuya identidad no ha sido divulgada, pasó por una operación en la que le fue retirado el cuchillo y permanece sedado en la unidad de terapia intensiva, donde recibe alimentación a través de sondas.