Hoy quisiera hablar de un par de adjetivos que suelen causar confusión: «asequible» y «accesible». Mientras que el primero se refiere a algo «que puede conseguirse o alcanzarse», según el Diccionario de la lengua española, el segundo significa «que tiene acceso» o que es «de fácil acceso». Por lo tanto, «asequible», parecido a «alcanzable», podría utilizarse al hablar de un precio, por ejemplo: «Ese producto es asequible».
«Accesible», por otro lado, podría emplearse al hablar de una cosa, un lugar o incluso el carácter de una persona: «La vereda es accesible» o «Él es accesible». En este último sentido, es muy similar a la palabra «afable».
Por cierto, hay que aclarar que «accequible» resulta de una mezcla innecesaria entre los dos adjetivos mencionados y se considera incorrecto. En cualquier situación en la que esta palabra sea usada, lo más probable es que «asequible» o «accesible» sean los términos adecuados.
Finalmente, quisiera responder una pregunta que llegó a raíz de la columna anterior: ¿debería decirse «un Águila» o «una Águila» al pedir una cerveza de esa marca? Según la Real Academia Española, ambas formas son posibles. Yo me quedo con «una Águila». Allí se interpreta la omisión del sustantivo «cerveza» y, además, que «Águila» alude a la marca y no al animal. Puede parecer una anomalía, pero tengamos en cuenta que el artículo «el» no se usa ante nombres propios femeninos que empiezan con «a» tónica: «La Ángela solitaria quedó en el pasado», por ejemplo.