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Rabo de ají

Hombres de armas dejar

Pascual Gaviria
27 de octubre de 2021 - 05:30 a. m.

Había pasado tres años en la guerra. Era un joven combatiente del Epl en Urabá. Llegaba con su hermano desde el corregimiento de Pueblo Nuevo, en Necoclí, para pelear contra quién sabe quién en ese nudo de grupos enfusilados y venganzas que era la región en los años 90. Se abría una puerta para la desmovilización, pero muchos de los jóvenes con menos formación política sintieron que eso no era más que una forma de perder el respeto ganado a plomo. Tampoco era que el ambiente fuera muy propicio. En ese mismo 1990, a comienzos del año, más de 60 hombres llegados desde Valencia, Córdoba, habían secuestrado a 43 campesinos en el corregimiento de Pueblo Bello, en Turbo. Los llevaron a la hacienda Santa Mónica, los presentaron frente a Fidel Castaño y luego los asesinaron y desaparecieron en una orilla del río Sinú. La masacre fue cometida por los Tangueros, guiados por el ejército luego del robo de unas reses. En su momento se dijo que fue un muerto por cada vaca robada.

Aparecieron entonces las disidencias de ese proceso con el Epl guiadas por Francisco Caraballo, comandante que solo veía la guerra como una opción posible y respetable. Hombre de purgas y sangre fría. Los hermanos Úsuga y sus amigos se fueron inclinando por un ejercicio más pragmático de la violencia. Menos discurso y más plata, podría ser la consigna. De modo que no duraron mucho con Caraballo. De ahí salieron cuatro de los hombres claves de las llamadas Autodefensas Gaitanistas de Colombia: Dairo de Jesús Úsuga; Juan de Dios Úsuga; Roberto Vargas, alias Marcos Gavilán, y Francisco José Morelo, alias Negro Sarley. La matazón los llevó al resguardo de las Farc para sobrevivir. Hacían mandados y en su tiempo libre trabajaban por cuenta propia. En medio de la maraña de masacres, combates, ajustes de cuentas, alianzas y traiciones, cayeron en desgracia con la gente del Frente 5 de las Farc y les tocó buscar un nuevo refugio. Ahora la casa Castaño les abría las puertas y bajo una nueva franquicia.

A estas alturas ya tenían historias de guerra en bandos contrarios, conocían los azares de las negociaciones, habían mostrado obediencia frente a cualquier brazalete. De nuevo servían como apoyo para operaciones de las Auc en el Bajo Cauca antioqueño y en otras zonas del departamento. Son el ejemplo perfecto para el libro Guerras recicladas, de María Teresa Ronderos, publicado hace siete años. Probando finura llegaron al Bloque Centauros en los Llanos. Allá los envió Vicente Castaño para que apoyaran los esfuerzos de Daniel Rendón Herrera, alias Don Mario, y Henry López Londoño, Mi Sangre. Y luego volvieron a desmovilizarse con algo de desgano. Muy pronto estaban en de nuevo en armas por orden de Vicente Castaño y al mando de Don Mario. El asesinato de Vicente Castaño les dictó el nombre y se hicieron llamar Héroes de Castaño en honor al Profe Vicente. Era el año 2007 y la OEA, encargada de la vigilancia al proceso de las Auc, hablaba de una estructura que operaba de civil, con armas cortas y estaba formada sobre todo por desmovilizados de los bloques Bananero y Élmer Cárdenas: “Se estima que puede tener hasta 50 hombres”, decía la OEA en ese momento, cuando comenzaba a hablarse de los Urabeños. En 2010 el Ejército describía una organización de al menos 200 hombres con presencia en el Magdalena Medio, Cesar, Santander y en contacto con combos en algunas capitales. En 2012 habían multiplicado por diez sus hombres. Las Autodefensas Gaitanistas de Colombia estaban en plena expansión y tenían un nuevo jefe. Daniel Rendón Herrera había caído en abril de 2009 en Turbo y el patrón era alias Otoniel.

 

Periscopio(2346)27 de octubre de 2021 - 05:19 p. m.
Para una conciencia noble y combativa no hay heroísmo más grande que renunciar al uso de las armas cuando su justa indignación la obliga a empuñarlas. Porque una conciencia noble y combativa por una verdadera justicia cristiana empuña las armas por amor al prójimo, pero renuncia a ellas por la misma razón. El honorable humanista Gustavo Petro no traicionó sus ideales sociales sino la opción armada
Jose(46118)27 de octubre de 2021 - 04:52 p. m.
Pascualito no dijiste nada nuevo ese portuario es ya es un tema muy remascado , trasnochado Hay si lo vimos mal Pascualin.
Antonio(sa3gs)27 de octubre de 2021 - 02:28 p. m.
Y no se ha terminado nada ,solo propaganda de este mal ,pésimo , gobierno
WILSON(19257)27 de octubre de 2021 - 02:27 p. m.
Blinken dijo que ha aumentado el consumo de cocaina en Estados Unidos, por lo tanto el negocio mejora. Felicita a Duque por este logro magnífico y propone continuar la "guerra contra el narcotráfico" y se pruduce entonces, la "captura" inmediata del capo Otoniel, para que no haya "dudas", de la "lucha despiadada contra este flagelo".
Atenas(06773)27 de octubre de 2021 - 01:55 p. m.
Vení, Cualpaz Gaviria, ¿y así tomas sin deglutir la información q’ aquí tan mal nos traduces? ¿Cuáles reces? Y en tal traducción, ¿si será q’ vos rezas, lo contrario de tu hermanito Alejandro q’ se declara ateo? ¿O te refieres al vacuno de 4 patas? Mejor andá a releer y volvés y nos contás. Además eso no es guerra, es criminalidad.
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