Gazapera

Christian, Giovanni y Jonatán

Con frecuencia leo en las páginas deportivas lo relacionado con el ajedrez, deporte en el que me desempeñaba lo suficiente bien para obtener los primeros puestos en los campeonatos barriales y empresariales. Bueno, pero ahora no es para aumentar mi palmarés, sino que en mi lectura del pasado viernes encontré que quien llevaba la delantera de un torneo en Palmira es un joven vallecaucano de nombre Cristhian (sic). Cuando un nombre se escoge mal hay muchos a quienes culpar: al notario y a sus secretarios, a los secretarios de los despachos parroquiales y a los padres y padrinos. En el caso de este Christian parece que quien escogió el nombre tenía la idea de que existía por ahí una hache, pero no supo dónde ponerla. Christian viene de Christus en latín y éste a su vez del griego y tal como el nombre de Cristo perdió la hache al llegar a nuestro idioma, también lo está haciendo Cristian. Pero creo que el nombre campeón para colgarle malas variantes es el de Giovanni, ensayé siete variantes y en todas hubo representantes avalados por mi buscador predilecto. Una las variantes más absurdas es «Yovany» pues siendo italiano ese nombre los usuarios no se dan cuenta de que la ye no existe en el abecedario itálico. Por último, muchos de quienes leen en la iglesia el libro primero de Samuel en sus capítulos décimo octavo y siguientes lo relacionado con la amistad de David y Jonatán insisten en que el hijo de Saúl se llamaba Yónatan aunque en los leccionarios esté correcto Jonatán.

Dentro de…

Mi amiga Diana Prieto me solicita angustiada que les cuente a los redactores de nuestro diario que la expresión «al interior de» no existe y que la que se debe usar «en el interior de».

Con la más buena voluntad, querida Diana, llevo 25 años tratando de explicarlo, pero no hay caso. Está comprobado que los errores gustan más que las correcciones y que en casa no me leen. Otra forma válida y que me gusta más es «dentro de»: «el incendio empezó dentro del edificio».

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