Menos ruido y más cabeza fría

Se oye recurrentemente en los medios que tras la caída de la principal comisionista del país, el mercado de valores quedó golpeado. Vale la pena preguntarse qué tanto, en qué medida y qué aspectos puntuales fueron los más afectados.

 Las utilidades de comisionistas y bancos que se publican frecuentemente, señalan una tendencia a la baja. El optimismo de una mejora también se ha disipado un poco, lo cual se ha visto reforzado por los numerosos escritos de prensa, que hablan de que hay falta de confianza en el mercado.

Pero por el bien de la objetividad, y con la firme intención que tienen todos los actores del mercado de recuperar la confianza de los inversionistas, es importante evaluar con cabeza fría y números el impacto real de lo ocurrido, sin olvidar que durante los últimos meses también se ha tenido la reacción negativa ante el cada vez más probable comienzo del retiro del estímulo monetario estadounidense.

Es importante pensar en el volumen de las negociaciones en bolsa: quienes no habían ingresado al universo de la inversión bursátil aparentemente se han sentido retenidos. Igualmente, muchos que ya habían incursado, se han visto tímidos en los últimos meses. Esto se refleja en una caída de los volúmenes del -26% durante el 2013. Pero si se excluye el efecto Interbolsa, el descenso sólo es del -3%. Por supuesto, si la coyuntura externa hubiera ayudado, lo más probable es que al hacer esta última comparación hubiéramos tenido un aumento.

Cuando se discrimina por tipo de mercado se evidencia que el del dólar viene registrando un aumento del monto transado, desmarcándose de la percepción generalizada de que todo está mal. ¿Tendrá esto que ver con una mayor participación de los inversionistas extranjeros?

Ahora bien, los análisis de la pérdida de la confianza parten de la base de la caída de las negociaciones de los TES, de las acciones y de otro tipo de bonos.

Las comparaciones simples respaldan la idea de que el mercado sigue muy afectado: Las negociaciones de los TES descendieron un -34%, las de las acciones un -37% y las de los otros bonos un -48%.

Pero centrándose en el mercado que atrae más atención y donde hay más información, el accionario, se encuentra que los extranjeros confían más que los colombianos. No solamente mantuvieron los volúmenes transados sino que los duplicaron. Por lo menos eso es lo que se desprende de las cifras de la BVC.

Y Finalmente, Ecopetrol y el GEA entre otros, se han mantenido prácticamente estables o incluso han subido en términos de volumen -no podemos decir lo mismo de los precios-.

Las oportunidades seguirán presentándose, y para aquellos que sepan mantener cabeza fría, es un momento único para aprovecharlas.

(*) Daniel Escobar, Director de Estrategias de Mercado Global Securities SA