Gran Bretaña y España

Un país ejemplo de democracia en el mundo es la Gran Bretaña.

Allí nació el parlamentarismo y de allí lo tomaron las naciones de Europa occidental, con un ejecutivo dual: un jefe del Estado, que reina pero no gobierna, y un jefe de gobierno que dirige la administración pública. Funciona casi a la perfección, con garantías de libertades públicas y con dos grandes partidos que permiten estabilidad: uno que gobierna y otro que hace oposición. Este último vigila y busca la manera de ser alternativa de gobierno en las siguientes elecciones. No se presenta allí la disolución del parlamento ni la convocatoria a elecciones anticipadas, como sucede en la gran mayoría de países de sistemas parlamentarios.

La Gran Bretaña hace unos siglos era dirigido por un monarca, luego por el parlamento y ahora por un primer ministro, a quien se le conoce como el hombre más poderoso del reino, y aunque formalmente lo escoge la reina, como jefe del Estado, el pueblo es quien lo elige por voto popular ya que el designado es aquel jefe del partido mayoritario de la Cámara de los Comunes. Como si fuera poco, acaban a elegir alcalde de Londres a un musulman.

En otros países europeos no pasa lo mismo. Durante la postguerra Italia ha tenido una inestabilidad política permanente y ahora el fenómeno se presenta en España en donde al finalizar el año pasado tuvieron elecciones y como consecuencia de la desaparición del bipartidismo, no se ha podido hacer gobierno. El Partido Popular (PP), que venía gobernado y en los últimos meses lo ha hecho de manera interina, no logró las mayorías requeridas. Y ni hablar del Partido Socialista (PSOE), que cada día disminuye su aceptación y sus antiguos seguidores han cogido caminos distintos, en nuevos partidos como Podemos e Izquierda Unida.

En 40 años de democracia España ha dejado de ser un país bipartidista, como la Gran Bretaña, para convertirse en pluralista. Ante el fracaso de crear gobierno, el 26 de junio habrá nuevas elecciones y si los resultados son similares a los del pasado diciembre, quien sabe cómo se podrá gobernar. Y eso que hay un partido, Podemos, que no ha podido.