¿Qué pasa en Avianca?

Es preocupante que la Empresa emblemática y orgullo de Colombia en transporte aéreo, esté dejando secuelas en sus usuarios por el pésimo servicio que está prestando.

No pasa semana sin que sus pasajeros tengan que sortear innumerables dificultades en los diferentes aeropuertos del País, esperamos que con la presente denuncia la Aeronáutica Civil y la Superintendencia de Industria y Comercio, tomen cartas en asunto tan delicado y preocupante.

Pero lo que más llama la atención, es que el epicentro de toda esta debacle de servicios lo lleva el Departamento de Caldas, con la ruta: Bogotá – Manizales – Bogotá,   que va a completar tres años sin ninguna solución a la vista. Los funcionarios de Avianca son conscientes de tan anómala situación, sin que hasta la fecha sus directivos se dignen tomar medidas para solucionarla.

Los monopolios son la antesala de la corrupción y los abusos al público consumidor, sus gerentes son burócratas emperifollados, llenos de prepotencia y arrogancia para someter a los usuarios, - que obligatoriamente tienen que asumir tan pésimos servicios- a los costos más denigrantes con oprobios y maltratos.

Como se dice en el argot popular: “no hay cuña que mas apriete que la del mismo palo” el doctor Fabio Villegas, Presidente de Avianca, se ha ensañado contra sus  paisanos Caldenses. Ocupar los servicios de Avianca, además de ser excesivamente costoso y humillante, se ha convertido en todo un martirio, con clara violación a los más elementales derechos del público consumidor.

Todo este despelote empezó, desde hace tres años, cuando Avianca ante el retiro de las demás aerolíneas que cubrían con mayor eficiencia dicha ruta, quedó con su exclusividad. Posteriormente empezó el viacrucis para sus usuarios: vuelos cancelados sin ninguna explicación, desvíos de las rutas al Aeropuerto Matecaña de Pereira; retrasos injustificados hasta de ocho horas, cancelación de vuelos a última hora en la ciudad de Manizales para unificarlos con los de Pereira, y en fin, todo esto lo hacen sin el más mínimo respeto y consideración por los pasajeros, abusando de su tiempo y trastornando irresponsablemente sus actividades tanto en las ciudades de origen como de destino.

Los precios de los tiquetes aéreos por Avianca, son tan escandalosamente altos, que muchas veces para cubrir la ruta: Bogotá- Manizales – Bogotá, pueden costar más de un millón de pesos, con el agravante que si cancelan el vuelo o desvían la ruta a la ciudad de Pereira, no hay derecho a que se hagan los reintegros de los excedentes correspondientes, siempre alegan mal tiempo, o fallas en las aeronaves, cuando la verdad es otra: se ha comprobado, que lo que están haciendo es burlarse de los usuarios que nos tenemos que aguantar, por el simple hecho de no existir otra empresa aérea que les haga competencia.

Hechas las investigaciones de rigor se concluye, que infinidad de veces los motivos se los inventan para otros propósitos: me permito citar  uno muy reciente entre los tantos que se suceden casi a diario: el vuelo 9833 del 2 de marzo que debía despegar del aeropuerto la Nubia de Manizales a las 5 y 37 de la tarde, fue cancelado sin ninguna explicación y nos obligaron aborda un bus para el aeropuerto Matecaña de Pereira, donde nos asignaron al vuelo 9804 que despegó a las 9 y 30 pm, llegando al terminal aéreo de Bogotá a las 10 pm, el motivo: simplemente se concluye que fue para unificar dos vuelos, para transportar “borregos”, con mayor economía.

Desde hace mas de tres años, se rumora que los desvíos también se producen como  consecuencia de la poca visibilidad que se presenta en las épocas de mal tiempo para aterrizar en la Nubia, este motivo puede ser razonable, sin embargo, según estudios técnicos de la Aerocivil, dicho problema se solucionaría con la instalación de un: VOR, aparato que permite dar visibilidad para un aterrizaje sin peligro. Según se pudo constar con el Gerente del Aeropuerto la Nubia, se invirtieron cuatro mil millones de pesos en la compra e instalación de dicho aparato, esta adjudicación se hizo con fecha de Agosto del 2012, y el trabajo debió entregarse en diciembre del mismo año, todo indica que esto no ha sucedido. Los Organismos de Control tanto del Departamento, como Nacionales, y la Aeronáutica Civil, deben entrar a investigar sobre la destinación de estos dineros, o si fue que el trabajo quedó de mala calidad, con el fin de establecer las responsabilidades a que haya lugar.

Todos sabemos que la aviación civil es un servicio público, que como tal está regulado por normas Constitucionales y que su máxima autoridad es el Departamento Administrativo de la Aeronáutica Civil, que a decir verdad está en mora de iniciar una investigación, para que aplique los correctivos y las sanciones correspondientes a Avianca, por el trato tan cruel con los usuarios del Departamento de Caldas.

Lamentable también que los dirigentes políticos de nuestro Departamento, no se hayan preocupado por este problema que nos está afectando a todos los Caldenses, que cuando requerimos viajar en razón de nuestras actividades, tengamos que soportar semejantes incomodidades. Sea este la oportunidad para decirles que con este caso les estamos midiendo el aceite sobre la capacidad de gestión que tienen ante las diferentes instancias del Estado. Esto lo comprobaremos el domingo en las urnas.

Valdría la pena que el Señor Gerente de Avianca, nos explicara si tan caótica situación tiene alguna solución a corto plazo, con eso los Caldenses sobremos a qué atenernos, para buscar alternativas que nos permitan disponer de un servicio de transporte aéreo sin tantos traumatismos y humillaciones, pero que por favor, el doctor Fabio Villegas Presidente de Avianca, no nos siga dando más “galleta”

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