México, ¿un modelo a seguir?

La Zona Arqueológica de Teotihuacán, en el estado de México, recibe al año dos millones de turistas. / iStock

Si algo han logrado a pulso los mexicanos es llevar la batuta cuando se habla de turismo. Han sabido promocionar tan bien su país, a través de su cultura y destinos, que hoy México es la novena nación receptora de turistas internacionales del mundo. Solo el año pasado recibieron 32 millones de extranjeros. ¿Cuál es su fórmula del éxito? ¿Cómo han logrado posicionarse en este sector tan competido?

México se tomó en serio la industria del turismo. Se dieron cuenta de que podría generarles, incluso, mayores ganancias y beneficios que otras actividades económicas como la construcción o la minería, según explica el presidente Enrique Peña Nieto. El turismo representa el 8,5 % del Producto Interno Bruto (PIB) y genera nueve millones de empleos. En 2015 dio ganancias por US$17.457 millones.

Para llegar a estas cifras, los mexicanos tuvieron que invertir bastante en promoción. La marca “México, Live It To Believe It”, con sus llamativos colores, está casi que tatuada en la piel de los extranjeros y habitantes de la región. Si usted visita el país, la escuchará, por lo menos, diez veces y lo verá otras cien en las redes sociales.

Sin embargo, la inversión va más allá de la promoción y llega a otros niveles, que por costos no pueden ser financiados por las naciones, como la infraestructura y el mejoramiento del servicio. Como está claro que no puede destinar tantos recursos como quisiera, el gobierno mexicano ha fortalecido sus alianzas con las empresas privadas para ofrecer un turismo de calidad. Para no ir tan lejos, hace pocos días Apple Leisure Group anunció, junto con Peña Nieto, una inversión de US$600 millones para la construcción de más hoteles en Los Cabos, Puerto Vallarta, Cancún y la Riviera Maya.

Estas alianzas son posibles en tanto exista una buena comunicación dentro del gremio. Para lograr esto, México se ha convertido en un excelente anfitrión de enormes eventos de turismo. Hace quince días, por ejemplo, se celebró el Tianguis Turístico, una enorme plataforma de negocios promovida por el Consejo de Promoción Turística de México (CPTM), en el que se llevaron a cabo alrededor de 37.000 citas de negocios y se recibieron 910 empresas y 605 compradores de 79 naciones.

Su objetivo es claro: llamar la atención de empresarios extranjeros y nacionales para que México se convierta en la primera opción entre sus clientes y, por supuesto, para que dichas compañías se instalen en sus territorios.

Durante el evento se realizaron múltiples charlas. Tal vez una de las que más llamó la atención fue la de Daniel Lamarre, presidente del Circo del Sol, quien expuso a sus asistentes “Luzia, a walking a dream of México”, un espectáculo que viajará por el mundo mostrando lo mejor del país azteca.

Esta es una alianza estratégica hasta ahora única, con la que se pretende promocionar más su nación, a través de este show que ha sido visto por 160 millones de espectadores en más de 400 ciudades del mundo. Relaciones públicas, lo llaman algunos, pero a decir verdad, es tal vez una de las mejores jugadas de quienes están al mando del sector del turismo. Ahora, desde Asia hasta América se hablará de esta nación centroamericana, que ha aprovechado su pasado indígena, gastronomía y bellos paisajes.

Aunque lo anterior es solo un plus, pues las tareas aún continúan, sobre todo dentro del mismo territorio. México está tan bien posicionado en el exterior que la prioridad de sus mandatarios ahora es incentivar a los mexicanos a viajar por su territorio. Para ello se creó la campaña “Viajemos todos por México”, con la que se busca dinamizar el sector a nivel local durante las temporadas bajas y así generar mayores ingresos, teniendo en cuenta que el 88 % de la actividad económica de la industria turística lo generan los viajeros nacionales.

Enrique Madrid, secretario de Turismo de México, explica que en la actualidad hay “9 millones de asientos vacíos, 200 millones de asientos de autobús sin ocupar y 93 millones de cuartos/noche de hotel disponibles al año”, que podrían aprovecharse así sea cobrando un precio más bajo. Mejor una pequeña ganancia que tener una factura en cero.

Con esta iniciativa también se busca promocionar otros destinos distintos a Cancún y Ciudad de México, como Chiapas, Yucatán, Guerrero y Jalisco, que también tienen su encanto. La meta es diversificar e invertir en otras experiencias que posicionen a México como un destino turístico para todos los gustos.

En ese sentido, han sido cuidadosos con el tipo de turismo que ofrecen. Los mexicanos no se cierran a las oportunidades y quieren capturar diferentes nichos. Por eso hoy están fortaleciendo el turismo LGBTI y el de bodas, que cada día se posicionan más. Rocío Lancaster, de la oficina de visitantes y convenciones de Guadalajara, manifiesta que para ello los estados deben acreditarse y cumplir con los requerimientos estatales. Actualmente, ya ocho fueron autorizados para promover este tipo de turismo.

Estas exigencias solo demuestran que en este sector no se debe improvisar. Por el contrario, se requiere de planeación y mejoramiento constante en el servicio. Esa tarea está tan bien hecha que, aunque suene a cliché, hoy lo mejor de México es su gente, siempre tan dispuesta a ayudar a los viajeros y entrenada para compartir lo mejor de su país, así existan problemas como el narcotráfico. No se trata de tapar el sol con un dedo, pero sí de potenciar lo mejor de cada región y así generar empleos, riqueza y desarrollo.

¿Qué puede aprender Colombia de México? Si bien ha aumentado el flujo de turistas, aún las cifras siguen siendo bajas en comparación con otras naciones latinoamericanas. Y aunque algunos pensarán que las comparaciones son odiosas , es válido cuestionarse por qué, si tenemos tanta cultura por explorar, destinos por recorrer y hasta gastronomía que mostrar, actualmente no somos una potencia turística y todavía estamos lejos de ser uno de los lugares más visitados del mundo. Tal vez es momento de mirar y seguir el ejemplo de quienes han demostrado que van por el camino correcto.