África desde un safari

Lowis & Leakey ofrece servicios de safaris más exclusivos en Kenia.

Andrés Ramírez Suárez
15 de diciembre de 2009 - 03:16 p. m.

El espíritu de África se esconde detrás de momentos sobrecogedores como el cielo naranja que ilumina las planicies del Parque Nacional de Serengueti, en Tanzania; atravesar en balsa el río Omo, al sur de Etiopía, o coronar la cima del monte Kilimanjaro, en busca de los gorilas de Ruanda y Uganda. Se conoce a África después de ver desde un globo la lucha de los depredadores por su comida y el éxodo de millones de especies en busca de agua en el verano.

Estas son algunas de las aventuras que ofrece la firma Lowis & Leakey, ubicada en Kenia, uno de los servicios de safaris más exclusivos del mundo. Al frente de esta compañía se encuentran Ninian Lowis y Lara Leakey, una pareja africana apasionada por la fauna y la naturaleza salvaje, descendientes de familias que han luchado desde hace siglos por la conservación del medio ambiente en ese continente.

Ninian estudió Biología en la Universidad Oxford Brookes, en Londres, para luego regresar a África como guía de safaris de lujo en Kenia y Tanzania. Lara Leakey proviene de una de las familias más reconocidas de Kenia. Estudió Arte y Derecho en la Escuela de Estudios Orientales y Africanos de la Universidad de Londres y trabajó con la Unicef en diferentes programas humanitarios. Antes de partir hacia una nueva aventura, Lara contó su historia para Summus.

¿Cómo se inició el proyecto de Lowis & Leakey?

Durante mucho tiempo soñamos con tener nuestra propia compañía de safaris. Abrimos el negocio porque queríamos aprovechar nuestra experiencia, que sumada llega a los treinta años –diez de los cuales Ninian los pasó como socio y director de Ker & Downey Safaris–. Esto nos posiciona como uno de los mejores operadores de safaris del continente.

¿Cuál es el concepto que identifica a Lowis & Leakey?

Ofrecemos experiencias diseñadas de manera personalizada, con aventuras que se ajustan a las características de nuestros clientes, dispuestas en diferentes locaciones de África. Nuestros servicios incluyen una unidad móvil y un equipo de camping, así como pequeños campamentos y albergues en destinos que visitamos desde hace años. También exploramos nuevas y exóticas rutas junto a nuestros huéspedes.

Sabemos que las personas invierten una gran cantidad de dinero y recorren un largo camino para iniciar su safari, por eso todos nuestros recorridos incluyen un guía privado, que por lo general es Ninian, quien es un conocedor excepcional de África. La idea es que los visitantes perciban los safaris como los percibimos nosotros: una fiesta para toda la vida.

¿Qué experiencias ofrecen los diferentes destinos de safaris del África?

África tiene muchos y muy variados tipos de safaris, la mayoría de los cuales giran en torno a la contemplación de la vida silvestre y la fauna salvaje, como los depredadores de Mara o los elefantes de Amboseli. También hay visitas para contemplar paisajes como los desiertos de Namibia o el cráter de Ngorongoro, en Kenia. Existen otros recorridos importantes por su cultura, como Etiopía o el norte de Kenia.

De acuerdo con el tipo de safari, los huéspedes pueden elegir hacer las travesías a pie, viajar en helicóptero, explorar los desiertos en camellos, cabalgar por las llanuras o tomar vuelos panorámicos en globo. También se puede seleccionar el tipo de alojamiento, ya sea en una cabaña de lujo o en una sencilla cama bajo las estrellas. Hay muchas maneras de disfrutar cada experiencia. Por eso nos interesa conocer primero a nuestros clientes para poder diseñar el mejor itinerario.

¿Cuál es el papel de cada uno de ustedes dentro del safari?

Ninian es el guía. Él viaja alrededor del mundo para conocer a los futuros huéspedes y recoger la información necesaria que nos sirve para diseñar los recorridos. También lidera los viajes, es el guía y amigo que hace de estas aventuras una experiencia aún más maravillosa. Mi trabajo consiste en coordinar y producir los recorridos, establecer la logística necesaria como la comida, los vehículos, los equipos, la decoración de los campamentos y la seguridad.


¿Parte del concepto de los safaris es inculcar en los visitantes una mayor conciencia ambiental?

Claro que sí. Estamos conscientes del efecto que causa el turismo en el medio ambiente y de la inmensa responsabilidad que tenemos de cuidar y mantener el equilibrio ambiental y social en los lugares que visitamos. Nuestros campamentos móviles son la manera menos perturbadora de disfrutar la naturaleza, pues fueron diseñados para armarse y desmontarse sin dejar huellas en el entorno. Nuestros itinerarios también incluyen visitas a las escuelas locales y los proyectos de fauna silvestre, como el santuario de rinocerontes en Lewa Downs, Kenia.

Sabemos que el principal patrimonio de África son sus paisajes y su fauna. Los desafíos para la supervivencia de estos lugares son grandes y algunos de los gobiernos locales hacen lo posible por gestionar y conservar estas zonas, pero las presiones causadas por el aumento de la población local son muy fuertes. La comunidad mundial debe preguntarse seriamente cómo puede apoyar estos esfuerzos de conservación y gestión ambiental. Durante su estancia en los safaris los huéspedes conocen de primera mano algunas de las iniciativas de conservación que se adelantan, ven los éxitos y los fracasos.

¿Existe algún perfil que caracterice a sus huéspedes?

Nuestros clientes prefieren mantenerse fuera de las rutas tradicionales y de los hoteles. Por lo general les gusta viajar de manera discreta y disfrutar de una experiencia diseñada a su medida. Por eso nuestros safaris son diseñados de forma personalizada, de acuerdo con las características particulares de cada a grupo. Nosotros recomendamos viajar en compañía de la familia o de buenos amigos. A diferencia de la mayoría de proveedores de safaris, nosotros aceptamos a niños de todas las edades porque creemos que un safari es un día de fiesta en el que todas las generaciones puedan disfrutar juntas. El lujo que ofrecemos se resume en tres conceptos: privacidad, exclusividad y flexibilidad.

¿Tienen un proceso de selección para escoger a los visitantes?

Realmente no. Nuestros servicios sólo se venden de boca en boca, sin publicidad, por eso dependemos de la satisfacción de nuestros huéspedes, quienes nos recomiendan a nuevos clientes. Eso hace que nuestro negocio se convierta en una especie de fraternidad de amigos.

¿Cuál ha sido su mayor satisfacción en este trabajo?

Ver tanta gente feliz, muchos de los cuales se convierten en amigos para toda la vida. Ver a familias enteras, desde niños de brazos hasta ancianos, llorando de felicidad al ver un atardecer en una planicie repleta de animales salvajes.

¿Qué tanto influyeron sus familias en el desarrollo de su nueva compañía?

La vida de los dos ha estado ligada a África y al medio ambiente desde que éramos niños.

Robert Lowis, el padre de Ninian, fue uno de los primeros guías y fotógrafos de safaris en la década de 1950. Él era una persona muy apasionada por África, como lo es Ninian. Yasuyo Lowis, su madre, fue una escritora japonesa que pasó gran parte de su vida documentando zonas silvestres y remotas. Ninian empezó a guiar safaris junto a su padre durante sus vacaciones escolares.

Yo me crié en el monte. Mis primeros años los pasé en tiendas de campaña de campamentos en las montañas de Nguruman, en el sur de Kenia o en la Garganta de Olduvai, en Tanzania, donde vivía mi abuela, la doctora Mary Leakey. Nuestra casa se encontraba en el borde del Parque Nacional de Nairobi. Mi infancia estuvo inmersa entre la fauna silvestre y en medio de aventuras en la selva. Me alegra poder criar a mis hijos aquí y compartir nuestra casa con los huéspedes. Trabajamos para que ellos sientan, así sea sólo por un momento, parte de la magia que nosotros disfrutamos toda la vida.

Por Andrés Ramírez Suárez

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