Una pluma para modernizar

El fabricante de computadores lanza una nueva versión de su portátil de gama intermedia, esta vez con lápiz digital. La idea es traer nuevas dinámicas de uso para motivar a los colombianos a actualizar sus equipos.

El Espectador
19 de julio de 2017 - 03:56 a. m.
El dispositivo llegó al mercado colombiano hace dos semanas gracias a la alianza entre HP, Microsoft e Intel para reducir su costo./ Cortesía
El dispositivo llegó al mercado colombiano hace dos semanas gracias a la alianza entre HP, Microsoft e Intel para reducir su costo./ Cortesía

Los fabricantes de computadores se están tomando en serio la carrera por modernizar los equipos con los que los colombianos trabajan, se informan y se entretienen. Entre ellos, uno de los que más empeño le han puesto a la tarea es HP, que hace poco lanzó en el país la nueva generación de portátiles Pavilion x360, la línea dos en uno que llega más liviana, asequible y con una pluma digital, apta para todo público.

Como señala Guillermo Tarquino, gerente de producto de portátiles para la marca en el país, la mayoría de computadores que se usan actualmente aquí son muy viejos, “tienen más de cinco años de uso y por ello se quedan cortos en muchas de las necesidades que los usuarios de computo tienen hoy en día”. Por ello, todos los fabricantes han convertido las nuevas dinámicas de uso en la punta de lanza para motivar a sus clientes a renovar sus equipos.

En este sentido, hace un par de años era suficiente traer portátiles que integraran tecnología táctil. Luego llegaron los productos dos en uno, que, ya sea porque las pantallas se desmontan de los teclados o porque dan un giro de 360°, son capaces de pasar rápidamente de computadores a tabletas. Para este año, HP quiere explotar al máximo la función Windows Ink, incorporada en el sistema operativo Windows 10.

Como señala Tarquino, su función es, básicamente, permitir el uso de lápices digitales de una manera más natural e intuitiva. No se trata de la pluma usada en los bancos, que deja firmas pixeladas y gruesas, ni de los sofisticados aparatos esgrimidos por diseñadores gráficos u arquitectos, sino de un punto intermedio, perfecto para cualquier tipo de usuario y toda gama de aplicaciones.

“Lo podemos usar en Power Point y me permite acceder a una barra de herramientas que no está diseñada para el mouse o el dedo. Se pueden hacer notas o usar el apuntador láser sobre la presentación, subrayar ideas en un texto de Word o resaltar errores en un PDF. También se puede trabajar con aplicaciones como Twitter, Youtube o Facebook. Realmente, no hay un límite”, anota el ejecutivo.

Se trata de una herramienta que no debe subestimarse. Un estudio hecho por Microsoft en el mundo concluyó que el 72 % de las personas que probaron este dispositivo antes del lanzamiento de Windows Ink lo usan más de una hora al día, mientras que el 77 % estaría dispuesto a pagar US$50 más por un dispositivo que tenga lápiz incluido.

Con esas cifras, no es de extrañar que el gigante de Palo Alto se le haya medido a traer su propia pluma, el lápiz Stylus, que es sensible a la presión que se le haga, funciona con una sola pila AAAA y tiene dos botones programables, que pueden servir para activar el borrador y el resaltador, o el puntero láser, sin necesidad de ir a la barra de herramientas. La apuesta de la marca es tan alta que el dispositivo viene incluido en la nueva generación de Pavilion sin ningún costo adicional.

Pero la inclusión del lápiz no es lo único que llama la atención de este portátil, que de hecho excede las características de su versión anterior, lanzada hace un año. Para empezar, cuenta con un procesador Intel de séptima generación con turbo boost, lo que no sólo hace que la velocidad de reacción del equipo sea más rápida, sino también que su batería dure más, hasta diez horas. También estrena la función de carga rápida: 90 % de la pila en sólo 90 minutos.

En cuanto al sistema de sonido, incorpora el ya tradicional B&O Play de alta calidad, con dos altavoces, y la pantalla WLED, diseñada para no sufrir con los rayones del Stylus, puede ser de 14” o 15” de cristal sin arsénico. Otras variables, como la calidad de la imagen (HD o Full HD), el procesador (de i3 con doble núcleo a i7 con cuatro núcleos), la memoria RAM (de 4 a 8 gigas) y el disco duro (de 500 GB a un tera) pueden hacer que su costo varíe.

Así, la versión más equipada, con acabados de plata mineral, alcanza los $2’500.000, mientras que el equipo, de entrada, con acabados plásticos, arranca en $1’500.000. Una rebaja considerable, si se tiene en cuenta que el mismo equipo sencillo, sin el lápiz, costaba $1’700.000 a su llegada el año pasado. Tarquino indica que esto fue posible gracias a una alianza hecha “con Microsoft e Intel para hacer una inversión conjunta con la que traer estos PC al mercado”.

Como se dijo al principio, la meta de todos los jugadores de la industria es una sola: la modernización. Por eso, más allá de traer nuevas y atractivas dinámicas, el reto es hacer los equipos de última generación cada vez más asequibles para más personas. En este sentido, el experto afirma: “La cultura colombiana ha ido cambiando”.

Por El Espectador

 

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