
Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Un video grabado en el marco del día de San Valentín refleja la sorpresa de muchos transeúntes al observar una enorme pantalla instalada en una de las calles de Santa Mónica, California (EE.UU.). (Vea el video aquí)
Se trataba de una pantalla gigante de rayos x que mostraba a dos esqueletos abrazándose, jugando, interactuando. Las muestras de cariño eran distintas, unos se abrazaban, otros se besaban, otros simplemente jugaban. Pero la sorpresa para los presentes siempre era ver quien estaba 'detrás de…'.
La primera “pareja de esqueletos” eran dos mujeres que tras revelar sus rostros se besan. Después, una mujer afrodescendiente con un hombre de otra raza (también se abrazan), una niña con síndrome de down y su hermana, una pareja de ancianos, una pareja de dos hombres junto a un niño que parece ser su hijo. Todas muestras de cariño iguales a los ojos de los transeúntes que observan a cada una de estas personas tras los rayos X.
Todo consistió en una campaña de Ad Council, una organización que realizó dicha iniciativa con el fin de abrir las puertas a la tolerancia y hacer entender que, tal como indica el título de su campaña, “el amor no tiene etiquetas”.
“Mi corazón no ve razas”
“El amor no tiene límite de edad”
“Tenemos religiones completamente diferentes, pero el amor es universal también”.
“Amor es amor” (pareja de mujeres)