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La historia Liu Xiunhuan le dio la vuelta a Perú, luego de que el 18 de enero un grupo de policías y funcionarios de la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (SNFL) clausurara el resturante del que es copropietario en Lima. La decisión se tomó luego de una denuncia, según la cual, se había descubierto una camioneta supuestamente con carne de perro, junto a un canino envuelto en una bolsa.
“Hay perros que han sido utilizados (...) para la cena de un ser humano”, dijo a la prensa un representante de Mi Pataza, una asociación de rescate y defensa de animales que encabezaba la protesta.
El restaurante que clausuraron corresponde a los famosos chifas, este es el nombre popular con el que se conoce en Perú a los restaurantes de inmigrantes asiáticos que fusionan su comida con la peruana.
El escándalo tomó un giro radical el 5 de febrero cuando un análisis toxicológico determinó que no se trataba de carne de perro sino de res. El hecho llevó a un grupo de afamados cocineros peruanos, liderados por Héctor Solís y Gastón Acurio, a reivindicar el honor del colega atacado injustamente y a anunciar que visitarán el modesto restaurante.
Esta semana iré al chifa Asia, de todas maneras. Hablen @gaston_acurio @Mitsuharu_maido @JBercke https://t.co/Xk8bXlzpKI
— Héctor Solís (@hectorsfiesta) February 5, 2018