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El hombre que sacó de su cargo a la fiscal general de la Nación, Viviane Morales, no es un peso pesado del derecho, no ha defendido a nadie y su nombre no había sido mencionado por los medios de comunicación hasta hoy. Es más, a sus 34 años Ferleyn Espinosa no se ha graduado de la carrera de Derecho que estudia de noche en la Corporación Universitaria Republicana. Y no lo ha hecho porque empezó a estudiar hace poco, no porque sea un estudiante mediocre, le aseguró Espinosa a los medios de comunicación.
Padre de tres hijos, Espinosa trabaja desde hace seis años para un bufete de abogados ubicado en el centro de Bogotá. Fue allí donde la curiosidad y las discusiones que sostenía con sus compañeros lo motivaron a presentar una demanda contra la elección de la hasta ayer jefa del ente investigador. Lo hizo, según él, sin intereses oscuros, y mucho menos porque considerara que la fiscal Morales lo estuviera haciendo mal. Incluso destacó su labor como jefe del ente investigador. “La demanda no fue contra la fiscal sino contra los actos administrativos que terminaron en ese nombramiento”, le comentó a La FM el estudiante de derecho.
Espinosa asegura que su demanda no la hizo solo: contó con la ayuda de familiares y expertos en derecho administrativo. Incluso, una de las personas que le colaboró fue su tío Hernando Benavides, la misma persona que le dio el empujoncito para llegar a la facultad de Derecho de la Republicana que regenta el abogado Iván Cancino, apoderado de, entre otros, el exasesor presidencial José Obdulio Gaviria.
Han sido tantas las conjeturas y suspicacias lanzadas tras conocerse el fallo del Consejo de Estado, que se ha acusado incluso a Gaviria, por medio de Cancino, como el hombre detrás de la demanda, señalamiento que Cancino, en diálogo con El Espectador, rechazó tajantemente: “El señor Espinosa presentó la demanda de nulidad sin que en la facultad tuviéramos conocimiento previo. Y si tuviera algún interés en anular la elección de la señora fiscal lo habría hecho personalmente, sin recurrir a testaferros jurídicos. Tengo el valor de pelear mis peleas de frente”.
Cancino agregó, además: “Por favor, que no se propicie la estigmatización bajo sesgados criterios circunstanciales. Esa demanda es producto de mandatos constitucionales, y bien pudo haber sido elevada por un estudiante de cualquier otra universidad, o incluso podía haber sido presentada por un particular”.
El abogado David Teleki, quien fue profesor de Espinosa, lo recordó como “un buen estudiante, hay que decirlo. No fue de los destacados, pero debemos reconocer lo meritorio por la forma como llegó a estudiar, como todos los de la Republicana, que son de escasos recursos. No era el más destacado o inquieto de su clase, pero creo que debe valorarse lo que hizo”. Lo claro es que Ferleyn Espinosa no ha empezado a litigar y ya tumbó a una fiscal general.