La familia real holandesa restituirá una pintura de su colección tras descubrir que fue confiscada a su propietario judío por los nazis, indicó el martes el palacio real.
El descubrimiento se produjo a raíz de una investigación independiente ordenada por el palacio real en 2012 sobre obras adquiridas tras la llegada al poder del partido nazi en Alemania en 1933.
"La investigación desvela que una de las pinturas había sido confiscada", indicó el informe.
"Un coleccionista judío fue forzado en 1942 a entregar el cuadro "El bosque de La Haya con vistas al palacio Huis ten Bosch", de Joris van der Haagen al banco (nazi) Lippman, Rosenthal & co en Amsterdam", explicaron.
Tras la guerra y la ocupación de los Países Bajos, la pintura fue hallada en posesión de un marchante de arte, a quien la reina Juliana lo compró en 1960 "sin conocer su historia", según la misma fuente.
Una asociación de arte real entró en contacto con los descendientes de los propietarios para restituirlo, afirmó el palacio, subrayando que no se revelará ningún otro detalle para proteger la vida privada de los descendientes.