Un atracador asaltó a otro delincuente y le robó la billetera adentro del furgón policial que los transportaba a ambos como detenidos en Arica (Chile), en la frontera con Perú.
El audaz maleante, identificado por la policía como Juan Raúl Corrales, había sido detenido momentos antes en una céntrica calle de Arica por robar, armado de un cuchillo a un transeúnte.
Una rápida denuncia de la víctima permitió a la policía detener pocos minutos después a Corrales que, pese a tener sólo dieciocho años, posee un amplio prontuario.
No obstante, el joven maleante, lejos de escarmentar, aprovechó que en el furgón policial iba otro detenido para proceder a intimidarlo y robarle la billetera.
En el tribunal de Garantía, el juez consideró al joven un peligro para la sociedad y ordenó su prisión preventiva por el período que dure la investigación del caso, pero Juan Raúl Corrales de nuevo sorprendió a todos, al estallar en un copioso llanto tras escuchar la resolución del magistrado.