“José Miguel Narváez fue el determinante de la muerte del señor Garzón, lo juro”. Con esta frase, Diego Fernando Murillo Bejarano, alias Don Berna, reiteró la hipótesis con que la Fiscalía señaló a Narváez como autor intelectual del asesinato del periodista y humorista Jaime Garzón. El exsubdirector del DAS fue llamado a juicio en junio del año pasado por este asesinato; y según Don Berna, fue Narváez “el determinador”.
Hablando ayer desde Nueva York para una audiencia de Justicia y Paz, Don Berna señaló que José Miguel Narváez les entregó a los paramilitares información de inteligencia sobre Garzón, quien fue asesinado por sicarios el 13 de agosto de 1999 cuando se dirigía a su programa en la emisora Radionet. “Él llega con la información de que Garzón no sólo es facilitador del secuestro, sino que hace parte de la estructura de las Farc”, expresó el exnegociador de las autodefensas.
Según la versión de Don Berna, fue un hombre de inteligencia militar quien apoyó en Bogotá la operación: el coronel Jorge Eliécer Plazas Acevedo, un militar condenado por el secuestro y desaparición de un comerciante y por el secuestro y muerte del industrial Benjamín Khoudari. Hombres del B-2, por orden de Plazas Acevedo, habrían recibido a los cuatro sicarios que envió Carlos Castaño para segar la vida de Jaime Garzón, identificados como Elkin, Yilmor, Sampedro y Ángel.
Murillo Bejarano agregó que Narváez les entregó a los hombres de Carlos Castaño una carpeta con información del periodista y humorista, datos con los que los sicarios pudieron ejecutar el homicidio. Inteligencia militar, además, habría aportado también información para cometer el asesinato de Elsa Alvarado y Mario Calderón, investigadores del Cinep ejecutados en su propio apartamento en Bogotá en mayo de 1999.
El crimen de Jaime Garzón fue planeado en la finca ‘La 21’, ubicada entre San Pedro de Urabá y Valencia (Urabá), la misma que también fue epicentro de varias reuniones entre paramilitares y políticos. La finca era una especie de cuartel general de los hermanos Fidel y Carlos Castaño, con quienes el general Farouk Yanine, aseguró Don Berna, habría mantenido una estrecha relación. Yanine, quien falleció en agosto de 2009, estaba siendo investigado por su posible participación en la masacre de La Rochela en 1989.
El revuelo que causó la muerte de Garzón, sin embargo, habría afectado a Castaño más de la cuenta. “Esa noche Carlos se toma unos tragos, manda traer la Biblia, me dice que ponga la mano ahí y le jure que nunca voy a hablar de eso”. Don Berna —condenado a 31 años en EE. UU. por narcotráfico— también se refirió al asesinato de Gabriel Jaime Santamaría, miembro de la Unión Patriótica y presidente de la Asamblea de Antioquia, asesinado el 26 de octubre de 1989.
Indagación por ‘Los Pepes’
Por otra parte, ayer se conoció que las declaraciones de otro exjefe paramilitar, Freddy Rendón Herrera (alias El Alemán), impulsaron que se abriera una investigación preliminar en contra del exfiscal general Gustavo de Greiff y el exdirector del DAS general (r) Miguel Maza Márquez. Según El Alemán, ambos hombres promovieron la creación de ‘Los Pepes’, el grupo armado ilegal que organizaron enemigos de Pablo Escobar para acabar con él y sus colaboradores.
La Comisión de Acusación, a cargo del expediente, definirá si se abre investigación formal o no prontamente. La noticia fue revelada por Caracol Radio.