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El animal cayó a la bandeja donde Bell tenía la comida que cenaba y cuando el ciudadano canadiense intentó retirarlo de allí sufrió una picadura en su mano.
Los asistentes de vuelo acorralaron al animal y lo echaron en el inodoro del avión. Entre tanto, Bell recibió una pastilla antihistamínica para prevenir cualquier reacción alérgica a la picada. Una vez llegó a tierra, fue atendido por médicos que determinaron que su vida no corrió riesgo en ningùn momento.
Aunque no está claro cómo llegó allí el animal, se sabe que antes de cubrir el trayecto en el que sucedió el incidente, la aeronave cubrió la ruta entre Texas y Costa Rica.
Esta ha sido una semana particularmente difícil para United Airlines pues el episodio en el que uno de sus pasajeros fue expulsado por la fuerza de uno de sus vuelos le dio la vuelta al mundo. Al parecer, el pasajero se negó a ceder su puesto para que fuera ocupado por funcionarios de la aerolínea que necesitaban estar en Louseville por sus turnos de trabajo.