Un video viral que probablemente lo hará llorar
Se trata de una campaña publicitaria de Taiwan que asegura que "dar es la mejor comunicación".
El Espectador
La compañía taiwanesa TrueMove lanzó un comercial publicitario que rápidamente se volvió viral en las redes sociales.
La empresa promueve el "dar sin esperar nada a cambio", bajo el eslogan de "dar es la mejor comunicación".
Aunque el video está subtitulado en inglés, la historia es fácilmente comprensible.
Se trata de un niño que es sorprendido robando en una tienda. La dueña del lugar lo descubre y los persigue.
Un hombre que atiende un local de comidas sale en defensa del niño, paga los gastos de lo robado y le da una ración de sopa de verduras; el pequeño la recibe y se va corriendo.
Treinta años más tarde, el hombre ya es mayor y sigue al frente de su negocio, cuando lo sorprende un ataque cardíaco y debe ser internado en un hospital. Días después, el centro médico les acerca el costo de la cirugía y la joven hija se ve obligada a poner en venta el local.
Un joven médico, responsable de la atención del hombre internado deja una carta sobre la cama en donde aparece que el costo del tratamiento es cero baths (la moneda de Tailandia), y asegura que el tratamiento fue pagado 30 años antes con una sopa de verduras.
La compañía taiwanesa TrueMove lanzó un comercial publicitario que rápidamente se volvió viral en las redes sociales.
La empresa promueve el "dar sin esperar nada a cambio", bajo el eslogan de "dar es la mejor comunicación".
Aunque el video está subtitulado en inglés, la historia es fácilmente comprensible.
Se trata de un niño que es sorprendido robando en una tienda. La dueña del lugar lo descubre y los persigue.
Un hombre que atiende un local de comidas sale en defensa del niño, paga los gastos de lo robado y le da una ración de sopa de verduras; el pequeño la recibe y se va corriendo.
Treinta años más tarde, el hombre ya es mayor y sigue al frente de su negocio, cuando lo sorprende un ataque cardíaco y debe ser internado en un hospital. Días después, el centro médico les acerca el costo de la cirugía y la joven hija se ve obligada a poner en venta el local.
Un joven médico, responsable de la atención del hombre internado deja una carta sobre la cama en donde aparece que el costo del tratamiento es cero baths (la moneda de Tailandia), y asegura que el tratamiento fue pagado 30 años antes con una sopa de verduras.