El caso del belga Rom Houben —quien durante 23 años aparentemente permaneció en estado vegetativo a raíz de un accidente de tránsito, hasta que hace pocos días los médicos anunciaron que en realidad todo este tiempo ha estado consciente y escuchaba y percibía lo que sucedía a su alrededor— ha generado un controvertido debate científico.
Mientras su madre, Fina Houben, confiesa que siempre había estado segura de que su hijo la oía y sentía sus caricias, y que ahora le está ayudando a escribir un libro en el que relata su impresionante historia, gracias a un teclado a través del cual puede comunicarse, varios médicos han comenzado a cuestionar si realmente este hombre posee el grado de conciencia que su madre y su doctor de cabecera dicen que tiene.
El reconocido científico James Randi, por ejemplo, se ha mostrado escéptico ante este caso que muchos catalogan como un milagro. Para Randi no resulta creíble que sea él quien se esté comunicando, cuando las imágenes que se han conocido son las de su madre controlando su brazo sobre un teclado, mientras Houben a duras penas sostiene la cabeza sobre su hombro derecho.
Aunque el médico a cargo de este caso, Steven Laureys, se ha defendido de sus críticos asegurando que tiene pruebas de que Houben efectivamente está consciente y posee la habilidad para interactuar con otros igual que cualquier persona, le quita peso a sus afirmaciones el hecho de que se niegue a mostrar aún estas evidencias.
Para el neurólogo Andrés Duarte es bastante prematuro emitir un concepto sin conocer los detalles del estado de Houben. Y aunque admite que si llega a ser cierto que puede comunicarse sería un avance extraordinario para la ciencia, cree que aún falta un largo camino por recorrer para entender cómo funcionan las esferas de nuestra mente, debido a lo cual, por el momento, considera que es poco probable que Houben sea capaz de escribir un libro por su cuenta e incluso de hablarle a su madre.
En su columna de El Espectador, Javier Moreno también cuestiona las habilidades de esta belga de 46 años. Y se pregunta por qué, si la ciencia ha logrado avances tan extraordinarios, no se utiliza un mecanismo de comunicación más certero y menos cuestionado que el famoso teclado, que le permita expresarse e interactuar con los demás sin necesidad de médiums que interpreten su pensamiento y su voluntad.
Los estados de coma
Coma diabético: se produce debido a que el nivel de glucosa en la sangre es demasiado alto o bajo.
Coma urémico: es causado por enfermedades renales.
Coma inducido: el paciente es sedado para proteger el cerebro y darle tiempo al cuerpo de recuperarse.
Coma anestésico: es utilizado para realizar algunos procedimientos médicos. La persona dura inconsciente un tiempo determinado, pero es un estado reversible.