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El Parque de Villa Dolores, el tradicional y humilde zoológico de Montevideo, se quedó sin leones después de que la última hembra de la especie que albergaba muriera por alguna de las malformaciones que padecía, tal como informaron responsables del lugar. (Vea: Desaparición de grandes carnívoros amenaza ecosistema del planeta)
El director de museos y zoológicos de la Intendencia Municipal de Montevideo, Eduardo Rabelino, explicó que la leona, de diez años de edad y nacida en cautividad, padecía graves problemas desde su nacimiento y que por eso no pudo ser trasladada al otro zoológico que existe en la ciudad, el Parque Lecocq.
La muerte de la leona le puso punto final a la presencia del rey de la selva en la capital uruguaya, ya que el zoológico, ubicado en las inmediaciones del Estadio Centenario y con más de cien años de historia, estará destinado a la conservación de especies autóctonas en peligro de extinción.
De hecho, los únicos ejemplares exóticos presentes en el zoo son una hembra de hipopótamo y una jirafa, que no pudieron ser trasladadas al otro centro por las dificultades que implica este proceso y de acondicionamiento de su hábitat.
El Parque Lecocq, por su parte, de mayor tamaño y ubicado en las afueras de la ciudad, será el único del país que mantenga animales representativos de la fauna africana en sus 150 hectáreas.
Hoy día, este zoológico, conserva en cautiverio 500 animales de 33 especies diferentes, y en sus alrededores viven en libertad otras variedades autóctonas como carpinchos, nutrias, zorros y gatos monteses.