Varios de los objetivos trazados en el nuevo Plan Nacional de Desarrollo “Colombia: potencia mundial de la vida” enfocan sus acciones en el campo colombiano, reconociéndolo como un sector estratégico para promover prosperidad e inclusión. Para ello, los esfuerzos se centrarán en la implementación de la Reforma Rural Integral y en el establecimiento de condiciones para garantizar una vida digna a las familias campesinas y las comunidades étnicas. (Puede leer: Economía de la biodiversidad: oportunidad para el fortalecimiento y protección de la Amazonia)
En este proceso, el diálogo permanente y activo entre el campesinado, grupos étnicos y el Gobierno Nacional es fundamental. Al respecto, con la intencionalidad de retomar un espiritu de trabajo conjunto con las organizaciones campesinas y étnicas, el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural ha decidido reactivar la Mesa Ampliada de la Agricultura Campesina, Familiar y Comunitaria (ACFC), como un espacio de diálogo y articulación interinstitucional.
Este espacio fue creado en 2017 y tuvo como principal resultado la promulgación de la Resolución 464 de 2017, “Lineamientos estratégicos de política pública para la Agricultura Campesina, Familiar y Comunitaria (ACFC)”, la cual es un ejemplo emblemático de construcción, participación, diálogo y consensos sobre políticas de desarrollo rural, entre el gobierno y las organizaciones campesinas.
En dicha resolución se plantearon 10 lineamientos estratégicos para el fortalecimiento de la ACFC: extensión rural y fortalecimiento de capacidades; bienes públicos rurales; acceso y tenencia de la tierra; incentivos y financiamiento; sistemas productivos sostenibles; circuitos cortos de comercialización; mercadeo social; diversificación productiva no agropecuaria; incidencia y participación; y sistemas de información. No obstante, a pesar de que la Resolución 464 ofrece un marco de acción para fortalecer a la ACFC, en la práctica, los avances en su operación han sido insuficientes. (Le puede interesar: La clave para evitar la extinción de un ave que solo habita en Colombia)
Como parte de la reactivación de este trabajo conjunto, en marzo de 2023 se firmó un acuerdo entre el Ministerio de Agricultura, la Agencia de Desarrollo Rural (MADR) y las organizaciones campesinas y étnicas, en el que se definieron las prioridades de trabajo conjunto: la implementación de la Ley 2046/2020 sobre compras públicas, la dinamización de circuitos cortos de comercialización, la aplicación de un Registro Único de productores y organizaciones de la ACFC y la necesidad de una política en agroecología.
Se estableció realizar sesiones de trabajo regulares con la participación de organizaciones de diferentes regiones del país, así como la importancia de concentrar las labores de la Mesa ampliada de la ACFC en la consolidación de acciones y revisiones para la política pública de comercialización y distribución de los productos de la economía campesina, familiar y comunitaria. También se definió realizar acciones jurídicas, técnicas, normativas y políticas, necesarias para lograr una participación efectiva por parte de las organizaciones campesinas en la política de compras públicas de alimentos, dando cumplimiento a la ley 2046 de 2020, así como en otros circuitos agroalimentarios.
Con este acuerdo inicial, el pasado 10 y 11 de mayo de 2023 se reactivó oficialmente la Mesa Ampliada de ACFC, con la participaron activa de los representantes de las organizaciones y plataformas campesinas y étnicas (Red Nacional de Agricultura Familiar - RENAF Colombia, Federación Nacional Sindical Unitaria Agropecuaria – FENSUAGRO, Asociación Nacional de Mujeres Campesinas, Negras e Indígenas de Colombia – ANMUCIC, Organización Nacional Indígena de Colombia – ONIC, Plataforma mujeres rurales, Asociación Nacional de Zonas de Reserva Campesina – ANZORC, Asociación Nacional de Usuarios Campesinos – ANUC, Consejo Regional Indígena del Cauca – CRIC, Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca – ACIN, Coordinador Nacional Agrario – CNA, Proceso de Comunidades Negras, Red de Pescadores y Acuicultores Artesanales y Étnicos de Colombia, Red de Semillas Libres y Agrosolidaria). (También puede leer: Un video hizo que científicos piensen que los pulpos pueden tener pesadillas)
Todos ellos articularon acciones con las entidades involucradas en los procesos señalados, como el MADR, la Agencia de Desarrollo Rural (ADR), el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (INVIMA), el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN), el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, y la Agencia Nacional de Compras Públicas (Colombia Compra Eficiente).
El principal objetivo de este espacio fue el de revisar con las entidades competentes la aplicación de las normativas sanitarias, la facturación y los sistemas de compra que puedan facilitar los procesos de formalización y participación de la agricultura familiar en los mercados.
La Mesa ampliada de ACFC también es acompañada por la cooperación internacional. Para la reactivación de este espacio se han sumado los esfuerzos del MADR, junto a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), a través del convenio de cooperación “Políticas para la ACFC”. Además, el “Programa Desarrollo Rural con Enfoque Territorial (DRET II)” - financiado por Unión Europea (UE), la Agencia Italiana de Cooperación para el Desarrollo (AICS) y la FAO, y con el cual se está apoyando la dinamización, el impulso e implementación de los lineamientos de política para la ACFC en el país.
Así las cosas, se busca llevar a cabo el plan de trabajo para el período 2023-2024 con componentes y acciones específicas; concertando los ejes de trabajo, resultados esperados, actores vinculados, sesiones de trabajo con participación territorial y demás aspectos que permitan el reconocimiento de las organizaciones sociales en su labor y mayor inclusión en la comercialización y mejoramiento de sus condiciones de vida. (Puede leer: Deuda por naturaleza, una propuesta beneficiosa para el ambiente y los países)
En este marco, el próximo viernes 2 de junio se conmemora en Colombia el día del campesino. Además de ser una “conmemoración de nuestra diversidad y nuestra multiculturalidad”, se busca el reconocimiento al rol que han tenido las comunidades campesinas en el país, tal como quedó establecido en el Acuerdo de Paz, “en el desarrollo del campo, la erradicación del hambre, la generación de empleo e ingresos, la dignificación y formalización del trabajo, la producción de alimentos en el desarrollo de la nación, en coexistencia y articulación complementaria con otras formas de producción agraria”, consolidando acciones que mejoren sus condiciones de vida.