Con motivo de la conmemoración del Día de los Océanos la revista especializada Biogeoscience publicó un estudio en el que describe cómo las aguas de los mares y los océanos han absorbido cerca del 25 % del CO2 emitido por el hombre, lo que ha provocado su alteración química.
El estudio, que fue adelantado en un sector de la corriente de Humboldt a lo largo de la costa chilena, reveló cómo los niveles elevados de dióxido de carbono (CO2) y la escasez de oxígeno agravan el estrés de la vida marina, lo que ha traído una progresiva acidificación de las aguas, que constituye una amenaza para el plancton y organismos calcificantes como los corales.
Según los investigadores, la respiración de los organismos marinos se está viendo comprometida entre los 200 y 400 metros de profundidad, lo que podría tener consecuencias negativas para la industria pesquera.
El Día Mundial de los Océanos (8 de junio), designado de desde 1994 por la Asamblea General de las Naciones Unidas ha generado distintas reacciones por parte de las organizaciones dedicadas a la preservación del medio ambiente. Desde España, el responsable de áreas marinas protegidas de organización internacional ambientalista WWF, Óscar Esparza, denunció nuevamente la degradación de los océanos y enumero como sus principales amenazas la sobrexplotación de los recursos marinos; la sobrexplotación pesquera; la destrucción y fragmentación de los hábitat marinos y la contaminación marina.
El caso colombiano no es la excepción. La vocera de la Fundación MarViva Colombia, María Margarita Gaitán, asegura que el ascenso del nivel del mar producto del cambio climático no deja ser una preocupación para los pobladores de las costas, y frente a la contaminación de los océanos por la concentración de CO2 recuerda que son esas aguas las que le entregan a la humanidad el 80% del aire que respiramos.
“Las basuras en el agua es otro de los aspectos preocupantes. Los pescadores de Bahía Solano ya nos dicen que las islas de basura están cada vez más cerca de las costas, se estima que estamos separados por 5 millas. Los pescadores terminarán llenando las atarrayas de bolsas y envases, la comida está en riesgo”, dice Gaitán luego de mencionar que se estima que los océanos reciben anualmente 6,4 millones de toneladas de basura.
La representante de MarViva agrega que a esta amenaza a los pescadores se le suma la sobrepesca que adelantan las grandes industrias en aguas colombianas, “se ha tecnificado tanto la recolección de peces que las grades embarcaciones terminan por barrer con toda la población, dejando sin sustento a los pescadores artesanales. Los turistas llegan a nuestras playas también para comer de nuestro pescado pero parece que llegará el día en que especies como el atún ya no se van a servir a la mesa”.
Desde la Feria Internacional del Medio Ambiente que se realiza hasta mañana sábado en Bogotá, la organización hizo un llamado la necesidad de buscar alternativas para preservar la vida de los océanos a través de proyectos de investigación, el monitoreo de las industrias que se desarrollan en el mar y la expansión de áreas protegidas para la pesca artesanal.