La cantidad de residuos de plásticos en los océanos y mares no cesa de aumentar y, por esa razón, la Comisión Europea ha propuesto nuevas normas a nivel de la Unión Europea (UE) para los diez productos de plástico de un solo uso que se encuentran con más frecuencia en las playas y mares de Europa, así como para las herramientas de pesca perdidas y abandonadas. Así lo informó la página de la Comisión Europea en un comunicado de prensa. (Puede interesarle: Descubren otra isla de plástico en el océano Pacífico)
La decisión llega después de que la Unión Europea afrontara el problema de las bolsas de plástico en 2015, el 72 % de los europeos afirma haber reducido el uso de ese tipo de bolsas (según Eurobarómetro). Ahora, la UE se está ocupando de los diez productos de plástico de un solo uso y de los artes de pesca que, juntos, representan el 70 % de la basura marina en Europa. (Lea también: Prohíben las micro partículas de plástico en Reino Unido para salvar los océanos)
El comunicado aclaró que se aplicarán medidas diferentes a productos diferentes. Por una parte, se prohibirá la comercialización de productos de plástico de un solo uso para los cuales haya alternativas asequibles. Esta prohibición se aplicará a los bastoncillos de algodón, los cubiertos, los platos, las pajitas, los agitadores de bebidas y los palitos de globos de plástico, que deberán estar fabricados exclusivamente con materiales más sostenibles.
Por otra parte, en el caso de los productos para los que no haya alternativas fácilmente disponibles, el objetivo será limitar su uso imponiendo un objetivo de reducción del consumo a nivel nacional; aplicar requisitos de diseño y etiquetado e imponer obligaciones de gestión y limpieza de residuos a los productores. A este grupo pertenecen los recipientes alimentarios y de los vasos de plástico.
Por su parte, los productores contribuirán a cubrir los costes de la gestión y la limpieza de residuos, así como de las medidas de sensibilización en relación con los recipientes alimentarios, los envases y envoltorios (por ejemplo, de papas fritas y golosinas), los recipientes y vasos de bebidas, los productos del tabaco con filtro (por ejemplo, colillas), las toallitas húmedas, los globos y las bolsas de plástico ligeras.
Jyrki Katainen, vicepresidente de la CE y responsable de Fomento del Empleo, Crecimiento, Inversión y Competitividad, indicó que: "El plástico puede ser un material fantástico, pero tenemos que utilizarlo de una manera más responsable. Los plásticos de un solo uso no son una opción inteligente desde los puntos de vista económico y ambiental, y las propuestas que se presentan hoy ayudarán a las empresas y a los consumidores a evolucionar hacia alternativas sostenibles".
Próximas etapas
Ahora, las propuestas de la Comisión van a transmitirse al Parlamento Europeo y al Consejo para su adopción. La Comisión insta a las demás instituciones a que las traten como un asunto prioritario y a que ofrezcan a los ciudadanos europeos resultados tangibles antes de las elecciones de mayo de 2019.
Si la Comisión Europea logra sacar adelante esta legisación, Europa sería pionero en este tipo de regulaciones. Se estima que estas medidas evitarán que se produzcan unos daños ambientales que costarían unos 22.000 millones de euros de aquí a 2030; así como ahorrarle a los consumidores 6.500 millones de euros en el mismo periodo de tiempo. Y, lo más importante, evitarán que se emitan 3,4 millones de toneladas equivalentes de CO2, ayudando de esta manera a frenar el calentamiento global.
En Colombia, la lucha contra el plástico va lenta pero dando pasos. El año pasado, el mInisterio de Ambiente logró la aprovación e implementación del impuesto a las bolsas plásticas, y el 4 de mayo pasado, la empresa Tetra Pak prometió eliminar los pitillos de plástico de todos sus empaques.
Esta noticia fue redactada con base en información de N+1, tecnología que suma.