Noticias

Últimas Noticias

    Política

    Judicial

      Economía

      Mundo

      Bogotá

        Entretenimiento

        Deportes

        Colombia

        El Magazín Cultural

        Salud

          Ambiente

          Investigación

            Educación

              Ciencia

                Género y Diversidad

                Tecnología

                Actualidad

                  Reportajes

                    Historias visuales

                      Colecciones

                        Podcast

                          Opinión

                          Opinión

                            Editorial

                              Columnistas

                                Caricaturistas

                                  Lectores

                                  Blogs

                                    Suscriptores

                                    Recomendado

                                      Contenido exclusivo

                                        Tus artículos guardados

                                          Somos El Espectador

                                            Estilo de vida

                                            La Red Zoocial

                                            Gastronomía y Recetas

                                              La Huerta

                                                Moda e Industria

                                                  Tarot de Mavé

                                                    Autos

                                                      Juegos

                                                        Pasatiempos

                                                          Horóscopo

                                                            Música

                                                              Turismo

                                                                Marcas EE

                                                                Colombia + 20

                                                                BIBO

                                                                  Responsabilidad Social

                                                                  Justicia Inclusiva

                                                                    Desaparecidos

                                                                      EE Play

                                                                      EE play

                                                                        En Vivo

                                                                          La Pulla

                                                                            Documentales

                                                                              Opinión

                                                                                Las igualadas

                                                                                  Redacción al Desnudo

                                                                                    Colombia +20

                                                                                      Destacados

                                                                                        BIBO

                                                                                          La Red Zoocial

                                                                                            ZonaZ

                                                                                              Centro de Ayuda

                                                                                                Newsletters
                                                                                                Servicios

                                                                                                Servicios

                                                                                                  Empleos

                                                                                                    Descuentos

                                                                                                      Idiomas

                                                                                                      Cursos y programas

                                                                                                        Más

                                                                                                        Cromos

                                                                                                          Vea

                                                                                                            Blogs

                                                                                                              Especiales

                                                                                                                Descarga la App

                                                                                                                  Edición Impresa

                                                                                                                    Suscripción

                                                                                                                      Eventos

                                                                                                                        Pauta con nosotros

                                                                                                                          Avisos judiciales

                                                                                                                            Preguntas Frecuentes

                                                                                                                              Contenido Patrocinado
                                                                                                                              26 de octubre de 2015 - 09:09 p. m.

                                                                                                                              Sin suelo y sin comida para tanta gente

                                                                                                                              Aunque el 70% de los suelos degradados se encuentran en ecosistemas húmedos, países tropicales aguan intento internacional por recuperar estas tierras.

                                                                                                                              Lorenzo Morales

                                                                                                                              Delegados de 160 países se reunieron la semana pasada en Ankara, Turquía para recuperar las tierras erosionadas. Flickr - Enrique Domingo

                                                                                                                              Para 2030, casi todos los países del mundo deberían haber logrado frenar la perdida masiva de suelos fértiles o productivos, un fenómeno creciente producto del mal manejo de la tierra, el cual tiene implicaciones directas en la provisión de alimento y agua pura para millones de personas, sobre todo las más pobres.

                                                                                                                              Más de 160 naciones acogieron la meta de alcanzar una “neutralidad” en la degradación de sus suelos, es decir recuperar las tierras erosionadas o que han perdido su capacidad productiva. La meta que debe cumplirse en los próximos 15 años fue acordada durante la última reunión de los países firmantes del Convenio de Naciones Unidas sobre Degradación de Suelos, o UNCCD en Ankara,

                                                                                                                              “El manejo de los suelos será como la reina en el tablero de la lucha contra el cambio climático y la conservación de la biodiversidad”, dijo horas antes del cierre de las negociaciones Monique Barbut, secretaria ejecutiva de la Convención. “Como ninguna otra ficha, este acuerdo está llamado a cubrir y dar soporte a nuestras ambiciones en términos de clima, biodiversidad, empleo, migraciones y seguridad”, dijo.

                                                                                                                              Sin embargo, las metas – cuántas hectáreas y en qué lapso- quedaron en el terreno de lo voluntario: cada país fija sus propios objetivos y sus plazos. Esa flexibilidad, con frecuencia la nota dominante de las negociaciones mundiales sobre temas ambientales, sigue sembrando escepticismo sobre la efectividad de los acuerdos, cuando el aprovechamiento de los recursos del planeta por parte de los humanos parece estar llegando a sus límites.

                                                                                                                              La UNCCD es parte, junto a la Convención de Biodiversidad y la de Cambio Climático, del trinche con el que cuenta la política mundial para fijar las reglas de un modelo planetario de desarrollo sostenible.

                                                                                                                              Brasil, la piedra en el zapato

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              El acuerdo se logro en medio de un juego de intereses geopolíticos, en particular de aquellos países cuya economía depende en el uso intensivo del suelo, siendo Brasil uno de los casos más emblemáticos.

                                                                                                                              El meollo de la puja entre muchos países que padecen procesos severos de degradación de tierras o, en el caso más extremo, de desertificación, está en determinar cuáles son las zonas que los países deberían comprometerse a recuperar.

                                                                                                                              Brasil desplegó un contundente arsenal diplomático para evitar que el acuerdo de “neutralidad en la degradación de suelos”, incluyera zonas húmedas, las cuales corresponden a la mayoría de sus suelos.

                                                                                                                              “Brasil está impidiendo que realmente avancemos”, dijo un alto oficial de la UNCCD que pidió no ser identificado, pues no es un vocero oficial. “Y lo hace de manera sistemática, consciente y muy profesional”.

                                                                                                                              Brasil, con su régimen de lluvias tropical, es uno de los grandes productores de alimentos del mundo, con extensos monocultivos muchos de ellos en zonas deforestadas del Amazonas. Buena parte de su economía se sostiene en la exportación de alimentos, sobre todo de granos y carne.

                                                                                                                              En los próximos 25 años, la degradación de los suelos puede reducir la producción de alimentos hasta en un 12 por ciento, lo que aumentaría en casi 30 por ciento el precio de los alimentos en el mundo, según cifras recientes de la agencia de cooperación técnica de Alemania.

                                                                                                                              “Estamos perdiendo de vista para quién trabajamos aquí”, dijo Felipe Costa, uno de los delegados de Brasil en la Convención durante una de sus recurrentes intervenciones ante el resto de países. Brasil defiende la idea que cualquier acuerdo sobre degradación de suelos debe ser sólo para las tierras áridas, lo que cobijaría sólo una pequeña porción de su inmenso territorio.

                                                                                                                              Colombia, con algunos ecosistemas compartidos con otros países tropicales de la región, se ha alineado con esa misma postura. Las extensas sabanas de la Orinoquía están en la mira o han sido ya adquiridas por empresas agroindustriales que aspiran a desarrollar plantaciones extensivas en suelos naturalmente pobres, que podrían estar sujetos a recuperación.

                                                                                                                              Oficiales de la UNCCD, habituados a la diplomacia, públicamente prefieren evitar la controversia. “Yo no llamaría eso (la posición de Brasil) “bloquear””, dijo a El Espectador Richard Byron-Cox, de la UNCCD. “Aquí estamos para crear consensos”.

                                                                                                                              En las intrincadas sutilezas del lenguaje de Naciones Unidas eso no equivale a que todos estén de acuerdo sino a que nadie se oponga.

                                                                                                                              Por su parte China, el mayor consumidor de energía y alimentos del mundo y un actor decisivo en otras negociaciones mundiales sobre medio ambiente, para este tema se ha refugiado en el viejo truco que suele aplicar para evadir sus responsabilidades: se considera a sí mismo un país en vía de desarrollo que no puede acogerse a las metas de los más ricos y poderosos del mundo.

                                                                                                                              La urgencia de la UNCCD por mostrar avances se da durante su 12 reunión mundial que finalizó el sábado en Ankara, Turquía. La convención contra la degradación de suelos cumple casi 20 años de firmada por más de 160 países pero carece aún de metas concretas de recuperación de suelos.

                                                                                                                              La Convención atraviesa por una especie de crisis de identidad, pues sus hermanas -las de Cambio Climático y Biodiversidad- se han robado el lustre y el protagonismo, y con él, el dinero. “La Convención de los pobres”, la llaman, soto voce, los delegados y recuerdan que fue un instrumento que nació para atacar en buena medida los problemas de seguridad alimentaria y crisis humanitarias en África. Y hasta ahora parece estar costándole mucho dejar atrás ese estigma.

                                                                                                                              “Mucho reporte y pocas acciones”, dijo a El Espectador un delegado de otro país sudamericano.

                                                                                                                              Delegados de 160 países se reunieron la semana pasada en Ankara, Turquía para recuperar las tierras erosionadas. Flickr - Enrique Domingo

                                                                                                                              Para 2030, casi todos los países del mundo deberían haber logrado frenar la perdida masiva de suelos fértiles o productivos, un fenómeno creciente producto del mal manejo de la tierra, el cual tiene implicaciones directas en la provisión de alimento y agua pura para millones de personas, sobre todo las más pobres.

                                                                                                                              Más de 160 naciones acogieron la meta de alcanzar una “neutralidad” en la degradación de sus suelos, es decir recuperar las tierras erosionadas o que han perdido su capacidad productiva. La meta que debe cumplirse en los próximos 15 años fue acordada durante la última reunión de los países firmantes del Convenio de Naciones Unidas sobre Degradación de Suelos, o UNCCD en Ankara,

                                                                                                                              “El manejo de los suelos será como la reina en el tablero de la lucha contra el cambio climático y la conservación de la biodiversidad”, dijo horas antes del cierre de las negociaciones Monique Barbut, secretaria ejecutiva de la Convención. “Como ninguna otra ficha, este acuerdo está llamado a cubrir y dar soporte a nuestras ambiciones en términos de clima, biodiversidad, empleo, migraciones y seguridad”, dijo.

                                                                                                                              Sin embargo, las metas – cuántas hectáreas y en qué lapso- quedaron en el terreno de lo voluntario: cada país fija sus propios objetivos y sus plazos. Esa flexibilidad, con frecuencia la nota dominante de las negociaciones mundiales sobre temas ambientales, sigue sembrando escepticismo sobre la efectividad de los acuerdos, cuando el aprovechamiento de los recursos del planeta por parte de los humanos parece estar llegando a sus límites.

                                                                                                                              La UNCCD es parte, junto a la Convención de Biodiversidad y la de Cambio Climático, del trinche con el que cuenta la política mundial para fijar las reglas de un modelo planetario de desarrollo sostenible.

                                                                                                                              Brasil, la piedra en el zapato

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              El acuerdo se logro en medio de un juego de intereses geopolíticos, en particular de aquellos países cuya economía depende en el uso intensivo del suelo, siendo Brasil uno de los casos más emblemáticos.

                                                                                                                              El meollo de la puja entre muchos países que padecen procesos severos de degradación de tierras o, en el caso más extremo, de desertificación, está en determinar cuáles son las zonas que los países deberían comprometerse a recuperar.

                                                                                                                              Brasil desplegó un contundente arsenal diplomático para evitar que el acuerdo de “neutralidad en la degradación de suelos”, incluyera zonas húmedas, las cuales corresponden a la mayoría de sus suelos.

                                                                                                                              “Brasil está impidiendo que realmente avancemos”, dijo un alto oficial de la UNCCD que pidió no ser identificado, pues no es un vocero oficial. “Y lo hace de manera sistemática, consciente y muy profesional”.

                                                                                                                              Brasil, con su régimen de lluvias tropical, es uno de los grandes productores de alimentos del mundo, con extensos monocultivos muchos de ellos en zonas deforestadas del Amazonas. Buena parte de su economía se sostiene en la exportación de alimentos, sobre todo de granos y carne.

                                                                                                                              En los próximos 25 años, la degradación de los suelos puede reducir la producción de alimentos hasta en un 12 por ciento, lo que aumentaría en casi 30 por ciento el precio de los alimentos en el mundo, según cifras recientes de la agencia de cooperación técnica de Alemania.

                                                                                                                              “Estamos perdiendo de vista para quién trabajamos aquí”, dijo Felipe Costa, uno de los delegados de Brasil en la Convención durante una de sus recurrentes intervenciones ante el resto de países. Brasil defiende la idea que cualquier acuerdo sobre degradación de suelos debe ser sólo para las tierras áridas, lo que cobijaría sólo una pequeña porción de su inmenso territorio.

                                                                                                                              Colombia, con algunos ecosistemas compartidos con otros países tropicales de la región, se ha alineado con esa misma postura. Las extensas sabanas de la Orinoquía están en la mira o han sido ya adquiridas por empresas agroindustriales que aspiran a desarrollar plantaciones extensivas en suelos naturalmente pobres, que podrían estar sujetos a recuperación.

                                                                                                                              Oficiales de la UNCCD, habituados a la diplomacia, públicamente prefieren evitar la controversia. “Yo no llamaría eso (la posición de Brasil) “bloquear””, dijo a El Espectador Richard Byron-Cox, de la UNCCD. “Aquí estamos para crear consensos”.

                                                                                                                              En las intrincadas sutilezas del lenguaje de Naciones Unidas eso no equivale a que todos estén de acuerdo sino a que nadie se oponga.

                                                                                                                              Por su parte China, el mayor consumidor de energía y alimentos del mundo y un actor decisivo en otras negociaciones mundiales sobre medio ambiente, para este tema se ha refugiado en el viejo truco que suele aplicar para evadir sus responsabilidades: se considera a sí mismo un país en vía de desarrollo que no puede acogerse a las metas de los más ricos y poderosos del mundo.

                                                                                                                              La urgencia de la UNCCD por mostrar avances se da durante su 12 reunión mundial que finalizó el sábado en Ankara, Turquía. La convención contra la degradación de suelos cumple casi 20 años de firmada por más de 160 países pero carece aún de metas concretas de recuperación de suelos.

                                                                                                                              La Convención atraviesa por una especie de crisis de identidad, pues sus hermanas -las de Cambio Climático y Biodiversidad- se han robado el lustre y el protagonismo, y con él, el dinero. “La Convención de los pobres”, la llaman, soto voce, los delegados y recuerdan que fue un instrumento que nació para atacar en buena medida los problemas de seguridad alimentaria y crisis humanitarias en África. Y hasta ahora parece estar costándole mucho dejar atrás ese estigma.

                                                                                                                              “Mucho reporte y pocas acciones”, dijo a El Espectador un delegado de otro país sudamericano.

                                                                                                                              Por Lorenzo Morales

                                                                                                                              Ver todas las noticias
                                                                                                                              Read more!
                                                                                                                              Read more!
                                                                                                                              Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
                                                                                                                              Aceptar