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Chery, una de las principales empresas automotrices de China, presentó su más reciente avance tecnológico: un prototipo de auto volador llamado “Land and Air Vehicle”. Este vehículo, que representa una apuesta audaz por el futuro del transporte, promete transformar radicalmente la forma en que las personas se desplazan, tanto en entornos urbanos como en trayectos de larga distancia. Al combinar elementos de movilidad aérea y terrestre, este modelo abre nuevas posibilidades para mejorar la eficiencia y la rapidez en el transporte diario.
El prototipo “Land and Air Vehicle” de Chery es un vehículo híbrido que combina las características de un carro tradicional con la capacidad de volar. Una de sus principales innovaciones radica en su diseño aerodinámico, que está optimizado para ambas formas de transporte.
Fabricado con materiales ultraligeros como la fibra de carbono, este vehículo cuenta con hélices retráctiles y alas plegables que se activan solo cuando el vehículo necesita despegar, asegurando una transición fluida entre la conducción en carretera y el vuelo.
El vehículo, diseñado para transportar a dos pasajeros, no cuenta con volante ni acelerador, ya que su funcionamiento es completamente automatizado. Puede alcanzar una velocidad máxima de 120 km/h y volar a una altitud inferior a 1.000 metros. Su autonomía de vuelo es de 40 minutos, lo que lo convierte en una opción eficiente para trayectos cortos en entornos urbanos o suburbanos.
La posibilidad de ofrecer despegue y aterrizaje vertical (VTOL, por sus siglas en inglés) es uno de los atributos más sobresalientes de este modelo. Esta característica le permite operar en espacios reducidos y en áreas urbanas altamente congestionadas, donde los problemas de tráfico son frecuentes. Con esta capacidad, el “Land and Air Vehicle” ofrece una solución para evitar los trancones y reducir los tiempos de viaje, lo que representa una clara ventaja para la movilidad en ciudades densamente pobladas.
Además de su capacidad para sortear el tráfico terrestre, este carro volador está diseñado pensando en la sostenibilidad. Su estructura ligera y su eficiencia en vuelo permiten un menor consumo energético, lo que lo posiciona como una opción atractiva para un futuro donde la reducción de emisiones y el ahorro de recursos serán cada vez más prioritarios. Así, el “Land and Air Vehicle” no solo promete agilidad y rapidez, sino también un impacto ambiental reducido.
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El prototipo de carro volador presentado por Chery está equipado con un sistema de propulsión totalmente eléctrico, este vehículo incorpora un avanzado software de navegación basado en inteligencia artificial. Gracias a la implementación de tecnologías de conducción autónoma, el carro puede operar de manera automática, tanto en carreteras convencionales como en el aire, sin necesidad de intervención humana.
A pesar de los avances tecnológicos que presenta este prototipo, la introducción de autos voladores en el mercado enfrenta importantes retos regulatorios. Chery ha reconocido la necesidad de establecer un marco legal que permita la operación segura y controlada de estos vehículos aéreos. Para ello, la compañía está colaborando activamente con las autoridades reguladoras de China y otros países, con el objetivo de definir las normativas que regirán la circulación de estos autos en el espacio aéreo urbano, garantizando así su seguridad y viabilidad en el contexto real.
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Actualmente, el “Land and Air Vehicle” de Chery se encuentra en una etapa avanzada de desarrollo, aunque sigue siendo un prototipo. Según ha informado la empresa, el vehículo ya ha completado con éxito un vuelo de prueba, cubriendo una distancia de 80 kilómetros. Sin embargo, se espera que para 2025 se realicen pruebas de vuelo con tripulación, lo que representaría un paso clave hacia la comercialización de esta tecnología.
Uno de los objetivos a largo plazo de Chery, y de otras compañías involucradas en el desarrollo de autos voladores, es integrar estos vehículos en plataformas de transporte compartido. De esta manera, los usuarios podrían acceder a los carros voladores a través de aplicaciones móviles, permitiendo que este tipo de movilidad se convierta en una opción asequible y accesible para el público general.
Este modelo de uso compartido podría revolucionar la forma en que las personas se desplazan en las grandes ciudades, eliminando la necesidad de poseer un vehículo y optimizando el uso del espacio aéreo.