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¿Caja manual o automática? Recomendaciones para ahorrar gasolina

Entre los factores que más pesan al momento de elegir un vehículo, el consumo de combustible sigue siendo determinante, especialmente cuando se compara el desempeño entre las transmisiones manuales y automáticas.

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31 de julio de 2025 - 12:30 a. m.
En vehículos automáticos de alta gama o equipados con motores de gran rendimiento, el uso de gasolina extra puede traducirse en una mejora notable del desempeño.
En vehículos automáticos de alta gama o equipados con motores de gran rendimiento, el uso de gasolina extra puede traducirse en una mejora notable del desempeño.
Foto: freepik
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En Colombia, según datos del Registro Único Nacional de Tránsito (RUNT), circulan más de 20 millones de automotores, que incluyen motocicletas, carros, maquinaria, remolques y semirremolques. Entre los factores que más pesan al momento de elegir un vehículo, el consumo de combustible sigue siendo determinante, especialmente cuando se compara el desempeño entre las transmisiones manuales y automáticas, un debate que continúa siendo relevante para quienes priorizan la eficiencia y el ahorro.

De forma general, los vehículos equipados con caja manual brindan un mayor nivel de control sobre el comportamiento del motor y pueden resultar más eficientes, siempre que se conduzcan de manera adecuada. Por otro lado, un estudio elaborado por el grupo Momentum Motor indica que los modelos con transmisión automática registran un consumo cercano a un 5 % superior frente a los manuales, debido a que los conductores de este tipo de transporte no tienen el mismo nivel de control sobre el cambio de marchas y, por lo tanto, utilizan el acelerador de manera menos eficiente en ciertas situaciones. Sin embargo, las cajas automáticas modernas tienen diseños para optimizar el rendimiento.

Carlos Andrés Flórez, gerente de Soporte y Terceras Partes de Primax Colombia, advierte que muchos conductores de vehículos manuales cometen errores que incrementan el consumo, como hacer cambios de marcha de forma incorrecta o mantener el motor en altas revoluciones durante largos periodos. Además, conducir a altas velocidades en una relación de engranaje inadecuada obliga a la unidad de control del motor a inyectar más combustible para sostener la potencia.

Flórez también destaca que el uso deficiente del embrague y las aceleraciones bruscas pueden aumentar el gasto de combustible. “Aunque los vehículos manuales ofrecen un mayor control sobre el motor, ese beneficio se pierde si no se gestionan correctamente las revoluciones y los cambios”, explica.

Gasolina extra y alto octanaje: ¿cuándo conviene usarla?

Según Flórez, en vehículos automáticos de alta gama o equipados con motores de gran rendimiento, el uso de gasolina extra puede traducirse en una mejora notable del desempeño. Esto se debe a que muchos de estos modelos incorporan sistemas avanzados que mantienen el motor funcionando dentro de su rango óptimo, especialmente en condiciones de mayor exigencia.

“En trayectos urbanos frecuentes, donde las cajas automáticas priorizan cambios más suaves y progresivos, puede mantenerse un buen nivel de eficiencia utilizando gasolina corriente, siempre que así lo indique el fabricante”, aclara Flórez.

En el caso de vehículos con transmisión manual, Flórez explica que en recorridos exigentes —como pendientes prolongadas, trayectos largos o conducción con carga frecuente— la gasolina extra cobra especial relevancia. Gracias a su mayor número de octanos, contribuye a optimizar la combustión y protege el motor frente a esfuerzos adicionales.

“Un ejemplo es la Extra G-Prix de Primax, que alcanza hasta 98 octanos y cuenta con certificación Top Tier, desarrollada para ofrecer una combustión más limpia. Este mayor grado de octanaje permite que el motor trabaje de manera más eficiente, lo que puede significar un consumo hasta un 3 % menor de gasolina, manteniendo el máximo rendimiento y reduciendo las emisiones contaminantes”, precisa el experto.

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Recomendaciones para reducir el consumo según el tipo de transmisión

El consumo de combustible no solo depende del tipo de transmisión elegida. Factores como el estilo de conducción, el mantenimiento preventivo y, de manera especial, el tipo de gasolina utilizada, también tienen un impacto directo en la eficiencia del vehículo.

Con el objetivo de ayudar a los conductores a tomar decisiones más informadas, Primax Colombia comparte varias recomendaciones prácticas según la clase de transmisión:

  • Aproveche la tecnología de las cajas modernas: los sistemas automáticos actuales, como las transmisiones CVT o de doble embrague, están diseñados para mantener el motor dentro de su rango óptimo de funcionamiento. Esto permite que sean muy competitivos en términos de consumo, particularmente en ciudades con tráfico denso y constantes detenciones.
  • Adapte el tipo de gasolina a su transmisión y estilo de conducción: en vehículos automáticos de alta gama o con motores de alto rendimiento, usar gasolina extra puede mejorar de forma notable el desempeño. Para autos con caja manual que recorren trayectos exigentes o transportan carga con frecuencia, el combustible de mayor octanaje también puede optimizar la combustión.
  • Conducción eficiente para cajas manuales: aunque este tipo de transmisión ofrece mayor control, el consumo puede incrementarse si los cambios se realizan de forma incorrecta o se mantienen las revoluciones elevadas durante mucho tiempo. Usar adecuadamente el embrague y evitar aceleraciones bruscas puede generar un ahorro importante de combustible.
  • Tenga en cuenta el entorno y sus hábitos de manejo: en trayectos urbanos, donde las cajas automáticas logran transiciones más suaves y un control más constante, suele ser suficiente usar gasolina corriente si el motor lo permite. En contraste, para recorridos largos en carretera o situaciones que demanden mayor potencia, considerar gasolina extra puede garantizar un mejor desempeño.

Para Flórez, la elección entre una transmisión manual o automática no debe verse únicamente como una cuestión de preferencia personal o presupuesto. “Hoy también influye cómo se aprovecha cada tipo en términos de consumo y cuidado del motor. Sea cual sea la opción, tomar decisiones informadas sobre el combustible, mantener buenos hábitos de conducción y cumplir con los mantenimientos programados puede marcar la diferencia en ahorro y eficiencia”, concluye.

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