Un operativo realizado por las autoridades y el Hospital del Sur logró el desmantelamiento de una fábrica que reciclaba desechos hospitalarios en grandes cantidades para la producción de colchones y bombas neumáticas.
Los fuertes olores hicieron que la comunidad denunciara ante las autoridades que algo extraño pasaba al interior de una bodega de la empresa Ferroplast. Las autoridades investigaron y encontraron que la fábrica era clandestina y reciclaba productos hospitalarios desechables.
Según las autoridades, en el sitio se rellenaban colchones con pañales usados y se fabricaban bombas neumáticas con bolsas de suero, mangueras y jeringuillas utilizadas en diálisis.
Se hallaron más de 800 kilos de bolsas para diálisis y orina contaminadas con material orgánico (restos de sangre y orina) y más de dos toneladas de pañales usados que eran desbaratados, el plástico se fundía para volver a utilizarse en la fabricación de bolsas y el algodón era usado como relleno para colchones y así venderlos como nuevos. La bodega también contaba con una máquina artesanal para fundir los materiales, causando una gran contaminación en la zona.
Durante el operativo realizado, una persona fue capturada y puesta a disposición de las autoridades competentes.