Es un exabrupto que varios periodistas hayan sido objeto de seguimientos
Por Programa de Periodismo y Opinión Pública, de la Universidad del Rosario.
En su compromiso con la democracia, el derecho a la información y la defensa del bien común, el Programa de Periodismo y Opinión Pública, de la Escuela de Ciencias Humanas de la Universidad del Rosario rechaza cualquier tipo de injerencia indebida hacia los periodistas en Colombia y, en particular, contra el equipo de trabajo del portal periodístico Rutas del Conflicto (RdC), del que hacen parte algunos de nuestros egresados y profesores.
El periodismo es bastión de las democracias modernas en cuanto su labor se traduce en investigar, producir y difundir informaciones de interés público. Para que esto sea posible, se hace necesario proteger la libertad de expresión y de prensa, por cuenta de los distintos sectores que, con sus diversas funciones, integran el Estado de Derecho, el cual obliga a cumplir y respetar las normas establecidas.
Por eso, nos parece un exabrupto que varios periodistas hayan sido objeto de seguimientos y perfilamientos por parte del Departamento Conjunto de Inteligencia y Contrainteligencia del Comando General de las Fuerzas Militares del país, según reportan recientes investigaciones llevadas a cabo por la Revista Semana.
La opinión pública merece una respuesta que dé cuenta, no solo de las responsabilidades operativas sino también de las políticas, para prevenir precisamente acciones parecidas en el futuro contra el periodismo crítico y comprometido con la verdad, tan necesario para fortalecer una nación como la nuestra que, por años, ha padecido distintas formas de violencia y hostigamiento.
Nos duele, además, que estos seguimientos y perfilamientos se hayan extendido contra una parte de nuestros jóvenes periodistas, destacados por la excelencia en su trabajo de reportería, en un momento en que la humanidad está reconociendo, de nuevo, la importancia de un periodismo comprometido y sintonizado con los grandes problemas de la sociedad, tal como la Universidad misma les ha enseñado: tener a Colombia como el horizonte de todas sus metas y aspiraciones.
Si bien RdC no es un medio de la Universidad, sí cuenta con su apoyo decidido, al ser un proyecto innovador que permite fortalecer el periodismo de investigación, la reportería en terreno, el análisis riguroso de datos y contraste de fuentes, y en general, todo aquello que permita la reconstrucción de relatos en los que se evidencien los problemas de la memoria, la georreferenciación de las violencias a lo largo del territorio nacional, el rescate de las testimonios de las miles de víctimas causadas por las acciones que fustigaron actores de diversas vertientes ideológicas y, en últimas, la información sin cortapisas para su compromiso en defensa de lo público. Se trata del mismo apoyo que damos a la buena labor periodística en general y que implica pronunciarse en defensa de sus derechos.
Tal como advirtió Martín Caparrós, “el periodismo es contarle a mucha gente lo que otros no quieren saber”; y a eso, precisamente, los profesores de periodismo nos negamos a renunciar.
*Carlos G. Patarroyo G.
Decano de la Escuela de Ciencias Humanas
*Leandro Peñaranda C.
Director del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Eduar Barbosa C.
Profesor del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Daniel Barredo I.
Profesor del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Juliana Colussi Ribeiro
Profesora del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Diego García R.
Profesor del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Fátima Martínez G.
Profesora del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Germán Ortiz Leiva
Profesor del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Danghelly G. Zúñiga R.
Profesora del Programa de Periodismo y Opinión Pública
Por Programa de Periodismo y Opinión Pública, de la Universidad del Rosario.
En su compromiso con la democracia, el derecho a la información y la defensa del bien común, el Programa de Periodismo y Opinión Pública, de la Escuela de Ciencias Humanas de la Universidad del Rosario rechaza cualquier tipo de injerencia indebida hacia los periodistas en Colombia y, en particular, contra el equipo de trabajo del portal periodístico Rutas del Conflicto (RdC), del que hacen parte algunos de nuestros egresados y profesores.
El periodismo es bastión de las democracias modernas en cuanto su labor se traduce en investigar, producir y difundir informaciones de interés público. Para que esto sea posible, se hace necesario proteger la libertad de expresión y de prensa, por cuenta de los distintos sectores que, con sus diversas funciones, integran el Estado de Derecho, el cual obliga a cumplir y respetar las normas establecidas.
Por eso, nos parece un exabrupto que varios periodistas hayan sido objeto de seguimientos y perfilamientos por parte del Departamento Conjunto de Inteligencia y Contrainteligencia del Comando General de las Fuerzas Militares del país, según reportan recientes investigaciones llevadas a cabo por la Revista Semana.
La opinión pública merece una respuesta que dé cuenta, no solo de las responsabilidades operativas sino también de las políticas, para prevenir precisamente acciones parecidas en el futuro contra el periodismo crítico y comprometido con la verdad, tan necesario para fortalecer una nación como la nuestra que, por años, ha padecido distintas formas de violencia y hostigamiento.
Nos duele, además, que estos seguimientos y perfilamientos se hayan extendido contra una parte de nuestros jóvenes periodistas, destacados por la excelencia en su trabajo de reportería, en un momento en que la humanidad está reconociendo, de nuevo, la importancia de un periodismo comprometido y sintonizado con los grandes problemas de la sociedad, tal como la Universidad misma les ha enseñado: tener a Colombia como el horizonte de todas sus metas y aspiraciones.
Si bien RdC no es un medio de la Universidad, sí cuenta con su apoyo decidido, al ser un proyecto innovador que permite fortalecer el periodismo de investigación, la reportería en terreno, el análisis riguroso de datos y contraste de fuentes, y en general, todo aquello que permita la reconstrucción de relatos en los que se evidencien los problemas de la memoria, la georreferenciación de las violencias a lo largo del territorio nacional, el rescate de las testimonios de las miles de víctimas causadas por las acciones que fustigaron actores de diversas vertientes ideológicas y, en últimas, la información sin cortapisas para su compromiso en defensa de lo público. Se trata del mismo apoyo que damos a la buena labor periodística en general y que implica pronunciarse en defensa de sus derechos.
Tal como advirtió Martín Caparrós, “el periodismo es contarle a mucha gente lo que otros no quieren saber”; y a eso, precisamente, los profesores de periodismo nos negamos a renunciar.
*Carlos G. Patarroyo G.
Decano de la Escuela de Ciencias Humanas
*Leandro Peñaranda C.
Director del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Eduar Barbosa C.
Profesor del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Daniel Barredo I.
Profesor del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Juliana Colussi Ribeiro
Profesora del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Diego García R.
Profesor del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Fátima Martínez G.
Profesora del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Germán Ortiz Leiva
Profesor del Programa de Periodismo y Opinión Pública
*Danghelly G. Zúñiga R.
Profesora del Programa de Periodismo y Opinión Pública