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El veredicto se conoció sobre las nueve pasadas de la noche del viernes 30 de junio, en el Teatro Colón del centro de Bogotá. Entre casi 2.000 trabajos periodísticos que concursaban en la convocatoria, provenientes de toda América Latina y dos países de Europa, un reportaje publicado por Colombia+20 de El Espectador quedó entre los 15 finalistas al Premio Gabo de Periodismo y resultó ganador en la categoría de texto.
Es la primera vez que un trabajo colombiano gana el máximo galardón en dicha categoría del premio, que cumplió su edición número 11 este año y es otorgado por la Fundación Gabo, en el marco del festival del mismo nombre.
El reportaje “El grito por justicia y reparación de las mujeres afro violentadas sexualmente”, publicado por Colombia +20 El Espectador y escrito por Beatriz Valdés Correa, quien además trabajó durante varios años como parte del equipo de Colombia+20, se destacó de acuerdo con el veredicto del jurado por “la factura, la reportería, la escritura”. Mónica González (Chile), Paulo Roberto Pires (Brasil) y Yásnaya E. Aguilar (México) fueron los encargados de evaluar los trabajos y aseguraron que este reportaje “estremece porque permite desentrañar un tema tan asfixiado como las violaciones sistemáticas que hicieron parte del accionar de los actores armados durante el tiempo de mayor crudeza del conflicto armado en Colombia”.
La historia cuenta la lucha de mujeres afrocolombianas violentadas durante el conflicto armado, quienes por culpa de prejuicios racistas sufrieron crímenes sexuales cargados de sevicia. A pesar de que organismos estatales habían reconocido que en efecto existió una afectación diferenciada por su condición de género y etnia, poco se ha hecho para repararlas. Ellas, no obstante, no desfallecen en la lucha por justicia y tienen propuestas concretas de reparación.
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De acuerdo con la investigación de Valdés, entre 1958 y septiembre de 2022, 16.758 personas sufrieron violencia sexual y la abrumadora mayoría fueron mujeres, con un consolidado de 15.140. Entre ellas 1.409 son afrocolombianas. Sin embargo, de acuerdo con el reportaje “los datos de la Unidad para las Víctimas son más escandalosos, pero revelan lo mismo: la violencia sexual la ejercieron mayoritariamente contra las mujeres y, entre los grupos étnicos, las más afectadas fueron las afro. Hasta el 30 de noviembre de 2022, la Unidad tenía registradas a 36.572 víctimas de “delitos contra la libertad y la integridad sexual”. El 90 por ciento son mujeres y el 21 por ciento son Negras, Afrocolombianas, Raizales o Palenqueras (NARP)”.
Es por ello que durante la gala de premiación, la periodista Beatriz Valdés hizo hincapié en que “las consecuencias de la violencia sexual en los cuerpos de las mujeres afro van mucho más allá de lo que se ha reconocido”, declaró la autora en un video proyectado durante la ceremonia: “lo que hago es contar la historia de Aura [víctima de violencia sexual] y explicar por medio de otras voces cuáles fueron las consecuencias de esta violencia y cómo el Estado podría ayudar a repararlas. Como sociedad no hemos comprendido cuál es la dimensión de la violencia sexual y eso tiene que ver con que sobre este crimen hay un manto de culpa y un manto de vergüenza, lo segundo es que las mujeres han construido algunas propuestas de reparación que yo creo que al Estado no le debería quedar grande poder cumplirlas, el siguiente paso sería que las escucharan y que empezaran a trabajar en ellas”.
Justo eso mismo destacó el jurado, asegurando que “este trabajo pone el foco sobre un tópico más bien opaco, que necesita hablarse con claridad, narrarse, porque los delitos sexuales siguen siendo una brutal herida en Colombia. Emociona cómo se van desenvolviendo todos los aspectos del personaje, que se puede conocer en su totalidad gracias a una apuesta maravillosa que equilibra redacción y estructura”.