Este viernes la Red Nacional de Iniciativas por la Paz y contra la Guerra lanzó el Premio Nacional de Paz y Reconciliación, que será entregado a partir del 2023 a líderes, comunidades, organizaciones y otras iniciativas que se destaquen por su compromiso en la construcción de paz y reconciliación. El premio había sido entregado desde 1999 por Fescol y una alianza de medios de comunicación, pero se suspendió en 2016, tras la firma del Acuerdo con las Farc.
“Este premio simbólico será la confirmación de que hay un torrente de mujeres y hombres que por ningún motivo, por ninguna razón, renunciaremos a la tarea y la convicción de seguir tejiendo paz con manos ciudadanas”, aseguró Luis Emil Sanabria, copresidente de Redepaz. Además de esa organización, esta nueva versión del galardón será organizada por la Fundación Compaz, la Consultoría para los derechos humanos y el desplazamiento (Codhes) y la Red de Programas de Desarrollo y Paz (Redprodepaz).
El evento de lanzamiento del premio consistió en un reconocimiento especial al expresidente y Premio Nobel de Paz, Juan Manuel Santos, a quien le entregaron un ejemplar de la obra ‘El Ritual de la Reconciliación’ del escultor José Augusto Rivera. La escultura de cobre es un grupo de figuras humanas de diferentes edades, sin distinción de raza, género, clase, que se abrazan entre sí.
Al recibirlo, el expresidente Santos aseguró que colocará la escultura junto a la moneda del Premio Nobel de Paz. “Es más difícil hacer la paz, que hacer la guerra. Recibo este homenaje en nombre de las millones de víctimas que dejó este conflicto armado y por que ojalá podamos seguir trabajando para que no haya más víctimas en Colombia”, exclamó el expresidente. Réplicas de esta misma obra serán entregadas a las iniciativas galardonadas a partir de septiembre de 2023, cuando se entregará el primer premio, y que coincidirá con los 30 años de vida de Redepaz y la versión 26 de la Semana por la Paz.
Retomar una iniciativa de 17 años
Mogotes, un pueblo entero de Santander, fue el primer Premio Nacional de Paz, entregado hace ya 23 años, en 1999. La comunidad se organizó para decirle “no” al control violento del Eln y a la corrupción de su alcalde, y redactó un plan de desarrollo que incluyó sus verdaderas necesidades. De ese mismo talante fueron los galardonados por Fescol y una alianza de medios de comunicación hasta 2016 cuando se dio la primera firma del Acuerdo de Paz con las Farc.
“Ahí decidieron dejar de entregarlo con el supuesto de que ya firmada la paz con las Farc no era necesario continuar esta labor. Nosotros quedamos sorprendidos, esperamos unos años a ver si lo retomaban y hoy decidimos avanzar en una alianza de organizaciones para relanzarlo”, explica Sanabria de Redepaz. En esa alianza además de retomar el reconocimiento a los ejercicios de construcción de paz territorial, dieron paso más hacia la reconciliación, recogiendo las recomendaciones de la Comisión de la Verdad y lo llamaron Premio Nacional de Paz y Reconciliación.
Le puede interesar: “Tras cuatro años con freno de mano, Gobierno debe poner acelerador a la paz”: Santos
El premio resurge, además, en un escenario en el que el país se encuentra marcado por la confrontación armada en los territorios pero ad portas del inicio del diálogo entre el Gobierno Petro y el Eln y la manifestación de interés por parte de otros actores armados en buscar salidas negociadas al conflicto. “Hoy las comunidades en los territorios necesitan mayor reconocimiento. El Estado y la sociedad tenemos que rodear a líderes, lideresas y organizaciones para superar esta situación de amenazas, desplazamiento, asesinatos y masacres”, añadió Sanabria en conversación con Colombia+20.
En ello coincidió Carlos Ruiz Massieu, jefe de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia, quien calificó el premio como “una iniciativa fundamental que reconocerá los importantes pasos que en Colombia se están dando para superar las diferencias y divisiones”. Massieu señaló que es difícil encontrar una mejor expresión de la importancia de la reconciliación nacional en Colombia, que “la conmovedora obra del maestro José Augusto RIvera ‘El Ritual de la Reconciliación’”.
“No hay más noble objetivo que el de garantizar la no repetición de los horrores de la guerra para dar paso a la reconciliación”, aseguró y reiteró el compromiso y apoyo de las Naciones Unidas a la intención del Gobierno Petro de implementar lo acordado con las Farc y buscar salidas negociadas al conflicto con otros actores armados ilegales.
La obra de arte que recibirán como galardón
José Augusto Rivera escarbó en sus recuerdos para encontrar la representación de la reconciliación, el proceso que debía surtir el país tras la firma del Acuerdo de Paz con las Farc. “Y recordé que siendo niños cuando había conflictos entre hermanos, nuestros padres nos hacían pedir perdón y abrazarnos. Y tomé el abrazo como elemento fundamental para representar la reconciliación”, cuenta.
El gran abrazo de bronce que ahora es ‘El Ritual de la Reconciliación’ tuvo su primera aparición pública en 2016, durante el acto de reconciliación de las víctimas de la masacre de La Chinita (en Apartadó) con los exjefes de la guerrilla de las Farc. Luego, por la gestión del artista y el apoyo del senador Alexánder López, llegó a manos del papa Francisco en su visita a Colombia en septiembre de 2017. Ahora, Rivera prepara una versión de más de 2 metros de altura que será instalada en el jardín del Vaticano. “Tiene un avance del 60% en su fundición. Estamos gestionando los recursos faltantes con la Conferencia Episcopal, ante el Gobierno Nacional y el sector privado para su culminación”, contó el artista.
Hoy el artista se siente honrado de que este sea el galardón entregado tanto al Premio Nobel de Paz como a las iniciativas que se reconozcan de aquí en adelante. “Los artistas siempre tenemos la angustia de saber si una obra va a tener el reconocimiento del público y la convalidación como obra de arte. Desde La Chinita, todo han sido reconocimientos para la obra y ella ha buscado su camino. Para mí es un honor contribuir a ese reconocimiento con mi escultura porque es confirmar a este nivel político y social que esta es una obra que tiene el valor que yo quise darle”, añadió.