Se viene la Semana por la Paz

Se cumplen casi 30 años de la Semana por la Paz en un momento decisivo para la historia del país: el fin de la guerra con la guerrilla de las Farc, y junto a esta efeméride se recuerda cómo surgió una iniciativa que, a pesar de los innumerables fracasos de intentos de paz con la insurgencia, nunca desfalleció en el propósito de buscar una solución política al conflicto.

Nació en 1987, tras todas las consecuencias que trajo para la vida política del país la toma al Palacio de Justicia por parte de la guerrilla del M-19, la cruenta guerra del narcotráfico, los asesinatos sistemáticos de miembros de la Unión Patriótica y una débil tregua entre el Gobierno y las Farc. “La Semana por la Paz ha estado en todos los procesos que se dieron en los años 89, 90 y 91. Luego surgió Redepaz en 1993, y desde ese momento hasta nuestros días es la organización que tiene la responsabilidad de convocar y coordinar este encuentro con la reconciliación”, dice Luis Emil Sanabria, presidente de Redepaz.

Hacia los 90, en el marco de las desmovilizaciones del M-19, del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT), del Ejército Popular de Liberación (Epl) y del Movimiento Armado Quintín Lame, en vísperas de la Asamblea Nacional Constituyente, la Semana por la Paz continuó visibilizando iniciativas ciudadanas y se instauró oficialmente como un evento a nivel nacional. A mediados de esa década, con altos índices de violencia y desplazamiento en Colombia, la Semana por la Paz hacía llamamientos contundentes para desacreditar la guerra como mecanismo de resolución de los conflictos que padecía el país.

“Cuando fallan los diálogos con las Farc. Cuando la sociedad colombiana determina que las negociaciones no son la salida, sino que hay que vencer militarmente a las guerrillas, Semana por la Paz hace un ejercicio ligado a las pedagogías por la paz, a la construcción de nuevos caminos para la participación ciudadana y a mediados de 2005 al reconocimiento de las víctimas como sujetos de derechos”, apunto Sanabria.

A mediados de 2005 llegó el proceso de desarme de los paramilitares y Semana por la Paz decidió acompañar ese proceso de desmovilización y reincorporación a la vida civil.

Hoy, con las negociaciones entre el Gobierno y las Farc en su recta final, y ad portas del plebiscito que consultará a los colombianos sobre ese pacto, de nuevo Semana por la Paz cumplirá un papel histórico. Hoy es el lanzamiento oficial en el auditorio Luis Carlos Galán de la Universidad Javeriana, y las actividades se desarrollarán entre el 4 y 11 de septiembre. Incluirá alrededor de 3.000 actividades para la sensibilización y movilización.

La convocatoria tendrá ciclopaseos por la paz el 4 de septiembre en Bogotá y en varias ciudades del país, cabalgata de los niños por la paz el 8 de septiembre en varias localidades de la capital, hasta el gran concierto nacional el viernes 9 de septiembre. Allí, artistas internacionales como León Gieco, Víctor Heredia, Alejandro Lerner, Piero y otros músicos nacionales se juntarán para cantar en una sola voz por qué es mejor hacer “La guerra del amor”, como se llama la canción que le dedicarán a Colombia ese día. 

Se cumplen casi 30 años de la Semana por la Paz en un momento decisivo para la historia del país: el fin de la guerra con la guerrilla de las Farc, y junto a esta efeméride se recuerda cómo surgió una iniciativa que, a pesar de los innumerables fracasos de intentos de paz con la insurgencia, nunca desfalleció en el propósito de buscar una solución política al conflicto.

Nació en 1987, tras todas las consecuencias que trajo para la vida política del país la toma al Palacio de Justicia por parte de la guerrilla del M-19, la cruenta guerra del narcotráfico, los asesinatos sistemáticos de miembros de la Unión Patriótica y una débil tregua entre el Gobierno y las Farc. “La Semana por la Paz ha estado en todos los procesos que se dieron en los años 89, 90 y 91. Luego surgió Redepaz en 1993, y desde ese momento hasta nuestros días es la organización que tiene la responsabilidad de convocar y coordinar este encuentro con la reconciliación”, dice Luis Emil Sanabria, presidente de Redepaz.

Hacia los 90, en el marco de las desmovilizaciones del M-19, del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT), del Ejército Popular de Liberación (Epl) y del Movimiento Armado Quintín Lame, en vísperas de la Asamblea Nacional Constituyente, la Semana por la Paz continuó visibilizando iniciativas ciudadanas y se instauró oficialmente como un evento a nivel nacional. A mediados de esa década, con altos índices de violencia y desplazamiento en Colombia, la Semana por la Paz hacía llamamientos contundentes para desacreditar la guerra como mecanismo de resolución de los conflictos que padecía el país.

“Cuando fallan los diálogos con las Farc. Cuando la sociedad colombiana determina que las negociaciones no son la salida, sino que hay que vencer militarmente a las guerrillas, Semana por la Paz hace un ejercicio ligado a las pedagogías por la paz, a la construcción de nuevos caminos para la participación ciudadana y a mediados de 2005 al reconocimiento de las víctimas como sujetos de derechos”, apunto Sanabria.

A mediados de 2005 llegó el proceso de desarme de los paramilitares y Semana por la Paz decidió acompañar ese proceso de desmovilización y reincorporación a la vida civil.

Hoy, con las negociaciones entre el Gobierno y las Farc en su recta final, y ad portas del plebiscito que consultará a los colombianos sobre ese pacto, de nuevo Semana por la Paz cumplirá un papel histórico. Hoy es el lanzamiento oficial en el auditorio Luis Carlos Galán de la Universidad Javeriana, y las actividades se desarrollarán entre el 4 y 11 de septiembre. Incluirá alrededor de 3.000 actividades para la sensibilización y movilización.

La convocatoria tendrá ciclopaseos por la paz el 4 de septiembre en Bogotá y en varias ciudades del país, cabalgata de los niños por la paz el 8 de septiembre en varias localidades de la capital, hasta el gran concierto nacional el viernes 9 de septiembre. Allí, artistas internacionales como León Gieco, Víctor Heredia, Alejandro Lerner, Piero y otros músicos nacionales se juntarán para cantar en una sola voz por qué es mejor hacer “La guerra del amor”, como se llama la canción que le dedicarán a Colombia ese día.