Mamá de niña asesinada en Barranquilla desmintió versión del principal sospechoso

Leida Marcela Ballestas, madre de María José Ortega, aseguró que la versión dada por el principal sospechoso de la muerte de su hija no es cierta. Según el joven, a quien las autoridades identificaron solo con el nombre de Randy, su tío Gimmy José Chapman Peñaloza, de 45 años, le pagó $500.000 por cometer el crimen. De acuerdo con la declaración del menor de 16 años, Chapman ordenó el asesinato porque los familiares de la niña le adeudaban 120 mil pesos.

Ballestas aseguró que esa versión es falsa y que el crimen se habría hecho porque a una de sus hermanas le prohibieron salir con el joven. “Él (Randy) dijo que tuvo un noviazgo con mi hermana y mi mamá no dejaba a mi hermana tener la relación, por eso ella se cansó y lo dejó. Él mismo dijo que mi mamá no los dejaba que fueran novios”, dijo Ballestas a El Heraldo. Además, aseguró: “eso es mentira de esa deuda, no le debíamos nada, él no tenía ningún interés en matar a mi hija. La versión del pelao Randy es mentira. Nosotros tenemos un año de conocer a esa gente. Nunca se nos ocurrió que él (Randy) iba a hacer una vaina de esas”, agregó Ballestas Rondón.

Al testimonio de Leida se suma el de la hija de Chapman y su esposa.

“Eso fue algo personal con mi papá porque siempre lo regañaba. Eso de la plata es mentira, se está vengando de mi papá porque siempre lo corregía”, afirmó Katiuska Chapman, hija de Gimmy Chapman Peñaloza, al mismo medio.

Las autoridades siguen con las investigaciones para esclarecer el asesinato de la pequeña. De llegar a ser ciertas las declaraciones del joven de 16 años, este podría pagar cinco años de internamiento preventivo, según el artículo 187 del código de infancia y adolescencia. El sospechoso fue enviado a un centro de internamiento preventivo (servicio que presta atención a los adolescentes y/o jóvenes que presuntamente han incurrido en una conducta punible) en el departamento de Bolívar.

El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar realiza un acompañamiento a los familiares de la niña y rechazaron los hechos.

“Lamentamos que nuestros niños sigan siendo víctimas de la violencia. Confiamos en que las autoridades competentes logren esclarecer lo más pronto posible este hecho y los responsables reciban el máximo castigo”, dijo el director regional del ICBF en Atlántico, Benjamín Collante Fernández.

Lea: María José, la niña de seis años a la que mataron por una deuda de $120.000

Leida Marcela Ballestas, madre de María José Ortega, aseguró que la versión dada por el principal sospechoso de la muerte de su hija no es cierta. Según el joven, a quien las autoridades identificaron solo con el nombre de Randy, su tío Gimmy José Chapman Peñaloza, de 45 años, le pagó $500.000 por cometer el crimen. De acuerdo con la declaración del menor de 16 años, Chapman ordenó el asesinato porque los familiares de la niña le adeudaban 120 mil pesos.

Ballestas aseguró que esa versión es falsa y que el crimen se habría hecho porque a una de sus hermanas le prohibieron salir con el joven. “Él (Randy) dijo que tuvo un noviazgo con mi hermana y mi mamá no dejaba a mi hermana tener la relación, por eso ella se cansó y lo dejó. Él mismo dijo que mi mamá no los dejaba que fueran novios”, dijo Ballestas a El Heraldo. Además, aseguró: “eso es mentira de esa deuda, no le debíamos nada, él no tenía ningún interés en matar a mi hija. La versión del pelao Randy es mentira. Nosotros tenemos un año de conocer a esa gente. Nunca se nos ocurrió que él (Randy) iba a hacer una vaina de esas”, agregó Ballestas Rondón.

Al testimonio de Leida se suma el de la hija de Chapman y su esposa.

“Eso fue algo personal con mi papá porque siempre lo regañaba. Eso de la plata es mentira, se está vengando de mi papá porque siempre lo corregía”, afirmó Katiuska Chapman, hija de Gimmy Chapman Peñaloza, al mismo medio.

Las autoridades siguen con las investigaciones para esclarecer el asesinato de la pequeña. De llegar a ser ciertas las declaraciones del joven de 16 años, este podría pagar cinco años de internamiento preventivo, según el artículo 187 del código de infancia y adolescencia. El sospechoso fue enviado a un centro de internamiento preventivo (servicio que presta atención a los adolescentes y/o jóvenes que presuntamente han incurrido en una conducta punible) en el departamento de Bolívar.

El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar realiza un acompañamiento a los familiares de la niña y rechazaron los hechos.

“Lamentamos que nuestros niños sigan siendo víctimas de la violencia. Confiamos en que las autoridades competentes logren esclarecer lo más pronto posible este hecho y los responsables reciban el máximo castigo”, dijo el director regional del ICBF en Atlántico, Benjamín Collante Fernández.

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