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Semana Santa en Atlántico: playas cerradas, toque de queda y ley seca

El toque de queda y la ley seca regirán en los 22 municipios del departamento de la siguiente manera: jueves, viernes, sábado y domingo santo, la medida regirá desde las 4 p.m. hasta las 5 a.m., de cada día, hasta el lunes 5 de abril. Entrevista con la secretaria de Salud de Atlántico, Alma Solano.

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Martín Elías Pacheco
01 de abril de 2021 - 02:22 p. m.
700 uniformados del Departamento de Policía Atlántico y 200 de la Policía Metropolitana de Barranquilla forman parte del dispositivo de seguridad para la Semana Santa.
700 uniformados del Departamento de Policía Atlántico y 200 de la Policía Metropolitana de Barranquilla forman parte del dispositivo de seguridad para la Semana Santa.
Foto: Gobernación de Atlántico
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Desde el 24 de marzo de este año, la gobernadora de Atlántico, Elsa Noguera, declaró la alerta roja hospitalaria, pues la ocupación de camas está por encima del 80%. Asimismo, el departamento cerrará sus playas durante la Semana Santa para disminuir la velocidad de contagio de COVID-19. El cierre de todas las playas se hará desde el 1º de abril (jueves santo) hasta el 4 de abril (domingo de resurrección).

El toque de queda y la ley seca regirán por decreto departamental en los 22 municipios del Atlántico de la siguiente manera: jueves, viernes, sábado y domingo santo, la medida regirá desde las 4 p.m. hasta las 5 a.m., de cada día, hasta el lunes 5 de abril.

Los eventos religiosos, con motivo de la semana Santa se permitirán cumpliendo el 35 % del aforo en los templos y las medidas de bioseguridad, como es la de mantener dos metros de distanciamiento. Durante la Semana Mayor está prohibido el funcionamiento de discotecas y lugares de baile, así como el consumo de bebidas embriagantes en espacios públicos y establecimientos de comercio.

Para mitigar el impacto del cierre de las playas, se entregará un incentivo económico a cada trabajador. Con este auxilio se benefician en total 1.702 personas: 266 propietarios y 1.436 empleados de los negocios de gastronomía de este sector turístico.

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“Estamos trabajando de la mano con todos los negocios de los caseteros y los trabajadores para darle un apoyo económico, un auxilio que arrancará a partir del martes 30 de marzo a través de Super Giros. Estaremos entregando $3.240.000 a cada unidad productiva, que incluye un reconocimiento al propietario, pero al mismo tiempo, el salario de esos días de los trabajadores de las unidades productivas”, detalló Noguera.

Los auxilios se entregan conforme a los censos reportados por cada uno de los alcaldes de los municipios de Puerto Colombia, Tubará y Juan de Acosta. Los beneficiarios podrán reclamar los auxilios solidarios en los puntos de Super Giros seleccionados en cada municipio de acuerdo con el pico y cédula correspondiente.

Entretanto, 700 uniformados de Policía Atlántico y 200 de la Policía Metropolitana de Barranquilla forman parte del dispositivo de seguridad para la Semana Santa. También participa personal del Ejército, la Fuerza Aérea y Armada Nacional.

“Estos dispositivos tienen como fin garantizar la seguridad y tranquilidad de los habitantes del Atlántico. Hacemos un llamado a la comunidad para que cumpla con las normas de bioseguridad y con las medidas administrativas decretadas en los municipios, con el fin de disminuir los niveles de contagio por la pandemia que venimos afrontando por el virus del COVID-19”, explicó el secretario del Interior y Gobierno, Yesid Turbay.

Alma Solano, secretaria de Salud de Atlántico, habló con El Espectador sobre la importancia de estas medidas y la situación actual del departamento ante los nuevos casos de coronavirus.

Se decreta de nuevo alerta roja hospitalaria por la alta ocupación de camas UCI, ¿qué implica retomar esta medida?

La motivación más importante es la ocupación. A corte de 30 de marzo la ocupación de nuestras UCI estaba en el 87%, esta alerta nos permite tener el control de las camas de UCI y la optimización en el uso de los recursos. Otra de las razones es la velocidad de contagio que estamos observando, eso hace que se aumenten los casos rápidamente y de la misma forma aumente el uso de camas hospitalarias.

La decisión significa mantener la orden de suspensión de cirugías programadas o procedimientos quirúrgicos no urgentes en todas las IPS del departamento. De igual manera, se solicitó a todas las clínicas y hospitales garantizar el recurso humano suficiente para poder cubrir las necesidades que se generen con este proceso de alerta.

¿Cómo están trabajando con los alcaldes de cada municipio para articular medidas que eviten la propagación del COVID-19?

Las medidas restrictivas siempre se toman de manera conjunta, unificadas y en consenso con los 22 alcaldes municipales del departamento. En estos encuentros liderados por la gobernadora, Elsa Noguera, se analiza la situación de cada municipio y se discuten las particularidades de cada territorio para tomar decisiones coherentes con el momento de la pandemia en el departamento. En los municipios donde observamos un comportamiento de mayor afectación, se adicionan acciones específicas de carácter epidemiológico para bloquear las cadenas de contagio.

¿A qué se debe el aumento de contagios de las últimas semanas?

Son varios factores. En Colombia nos encontramos en total apertura de nuestras ciudades, necesaria además para la economía y el sustento de nuestra gente, pero que genera un aumento de los contactos y encuentros incrementando así el riesgo de contagio. Existe además una fatiga de la población por el largo tiempo que llevamos con medidas restrictivas, que hace que bajemos la guardia en algunos momentos y, por último, la sensación de que al llegar la vacuna ya estamos protegidos y bajamos la guardia, algo que hemos denominado como el “efecto vacuna”.

Se decretaron una serie de medidas para la Semana Santa, ¿cómo se preparan en las actividades de prevención y de fortalecimiento de la red hospitalaria?

Ante el aumento en la velocidad de contagio de COVID-19 en los municipios del Atlántico en los últimos días y la creciente ocupación de camas UCI, en conjunto con los alcaldes del departamento, se determinaron nuevas medidas para salvaguardar la vida de nuestra gente. La actividad económica continua, con restricciones de afluencia, pero se aplaza la vida social para detener el virus. El cierre de playas sin desamparar a quienes dependen de este sector para subsistir, medidas de pico y cédula para controlar el acceso a grandes superficies, y toque de queda y ley seca, son las medidas adoptadas por la Gobernación.

Desde el inicio de la pandemia se priorizó el fortalecimiento de la red pública del Atlántico para cumplir con las necesidades de nuestros pacientes. Por esto hoy podemos decir que contamos con recursos suficientes en nuestras instituciones para cumplir con los retos de esta Semana Santa. Entramos en una fase de 10 días clave para frenar la velocidad del contagio y por eso seguiremos con las acciones educativas para la aplicación de medidas de autocuidado en toda la población, y el cumplimiento de las medidas restrictivas. Además, mantendremos abiertos todos los puntos de vacunación en cada municipio para seguir protegiendo a los adultos mayores con las vacunas.

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